El caso quedó evidenciado en cámaras de seguridad el 8 de febrero, que muestran el momento en que un sujeto detiene su vehículo y toca de forma inapropiada a una niña que ofrecía productos en el bulevar Pablo Sexto en la zona 7 de Mixco. El video se viralizó en las redes sociales y las autoridades actuaron de oficio. Mediante una orden de juez el supuesto agresor de 68 años fue detenido el pasado domingo en Ciudad San Cristóbal, zona 8 de Mixco.
Este tipo de casos ocurren a diario, sin que se persiga a los culpables aseguran organizaciones en pro de los derechos de la mujer.
“Este caso quedó registrado en cámaras, pero hay miles que ocurren a diario y que lastimosamente no se denuncian porque no se puede individualizar al agresor y sin eso la denuncia no va prosperar”, afirma Claudia Hernández, directora de la fundación Sobrevivientes.
Hernández, refiere que las niñas que venden en la vía pública no tienen el apoyo de los padres o familiares y por consiguiente no van a acudir a las instancias de justicia para denunciar.
También lamenta que este tipo de casos por ser tipificados como una agresión sexual tienen una pena máxima de ocho años, aunque por lo general esta se reduce y se dan cinco años de prisión que se “vuelven conmutables”.
“Si hay aceptación de cargos por parte del procesado se dicta un procedimiento abreviado y la sanción puede bajar hasta tres años”, afirma.
Hernández explica que la sentencia también depende de la edad de la víctima y de los daños que le provoquen, puesto que la pena puede incrementar a seis años de cárcel si la menor queda embarazada, “aunque la sentencia no pasa de los ochos años”.
“Muchos casos de violación empiezan cuando a la víctima se le toca de forma inapropiada, en muchos casos no hay otra lesión más que solo el testimonio de la víctima y los jueces no lo toman como indicio contundente, porque dicen que no hay pruebas”, acota.
Vulnerables
Mirna Montenegro, directora del Observatorio en Salud Sexual y reproductiva (Osar),reitera que las niñas más vulnerables a una violación u agresión sexual están comprendidas entre los 7 y 14 años, según las estadísticas con base en las denuncias que se presentan en el Ministerio Público.
“Las menores víctimas de agresiones o violaciones representan el 95 por ciento de las denuncias y los niños un 5 por ciento”, denota.
Montenegro refiere que uno de los factores negativos, es que a las mujeres, principalmente de comunidades lejanas se les dice que no deben denunciar.
“Les dicen que no deben gritar, entonces las menores se cohíben, se callan y evaden ese tipo de realidad”, señala.
Añade que en algunos casos la agresión sexual es” demasiado poco” para los jueces y en el caso de la menor de Mixco, pueden hasta decir que es un mal enfoque de la cámara de seguridad y la persona queda en libertad.
Montenegro afirma que hay casos en los que víctima de violencia sexual quedó embarazada pero reside con el agresor, y cuando nace el bebé las condiciones de la menor empeoran.
“Pasa todo el embarazo intentado no enfermarse o no morir, nace el bebé y la condición de la niña empeora, porque no le puede dar de mamar al niño porque sus mamas no están formadas y tampoco puede mantener el gasto de la leche maternizada porque le cuesta Q80 o Q90 y le va durar dos días”, sentencia.
Niñas madres
En 2023, Osar documentó 2 mil 289 casos de menores de entre 10 y 14 años que se convirtieron en madres.
“Todas son casos de violencia sexual con agravación de la pena, Toda relación sexual con persona menor de 14 años es violencia sexual”, afirma Montenegro.
Según el informe, también se documentaron cuatro casos de niñas que se convirtieron en madres a los 10 años, en los departamentos de Alta Verapaz, Huehuetenango, Izabal y Sacatepéquez.
Denuncia
Montenegro afirma que 22 maestros con procesos abiertos por agresión o violencia sexual imparten clases en establecimientos educativos de Alta Verapaz, por lo que han pedido explicaciones al ministerio de Educación, luego de hablar con los directores de los establecimientos.
“Cuando preguntamos nos dijeron que los procesos administrativos son difíciles en el ministerio de Educación y más cuando están sindicalizados. Entonces, con qué confianza va mandar un padre a sus hijos, si ve que el docente que tiene una denuncia imparte clases. Si no lo puede despedir el ministerio debería ponerlos en un puesto administrativo”, denunció.
Según estadísticas de la Fundación Sobrevivientes, durante 2023 se reportaron 11 mil denuncias por abuso y agresión sexual, tanto de mujeres adultas como de niñas y niños.