La interpelación a De Ramos, programada para el próximo miércoles, solicitada por los diputados de la Unidad Nacional de la Esperanza, UNE, ha generado expectativa en el Congreso por las diferencias surgidas entre la ministra e integrantes del Frente Republicano Guatemalteco, FRG.
Aunque se había dicho que el FRG aprovecharía la llegada de la ministra al pleno para ?hacerle ver quien manda? y por eso ayudarían en la interpelación a los de UNE, ayer trascendió que existieron acuerdos en lo interno del FRG.
De Ramos habría dialogado con Efraín Ríos Montt, presidente del Congreso, sobre la interpelación.
Anterior al supuesto acuerdo se mencionó que tres diputados del FRG fueron quienes aconsejaron a UNE a efectuar la interpelación e incluso ayudaron a redactar la preguntas.
El supuesto complot con diputados oficialistas fue rechazado por los de la UNE.
El diputado Mario Flores dijo: ?Pedimos la interpelación por las denuncias sobre el mal estado de las carreteras?; además, para conocer sobre qué hará con los US$50 millones que recibirá de los bonos.
Sin embargo, algunos diputados vieron ayer como sospechosa la reunión entre legisladores de UNE -Rafael Barrios y Mario Flores- con Ríos Montt. Aunque indicaron que la cita fue para hablar sobre un cambio de oficinas.
La diputada independiente Anabella de León cuestionó el deseo del FRG de perjudicar a De Ramos.
?No me voy a plegar a los intereses oscuros de los eferregistas para perjudicar a la ministra, quien ha denunciado actos de corrupción durante la gestión de Luis Rabbé?, indicó.
La bancada oficial no descarta la posibilidad de participar en las repreguntas, porque existen muchas dudas con la realización de obras, explicó Leonel Soto Arango, vocero de la junta directiva, y presidente de la Comisión de Comunicaciones.
?Como presidente de la comisión, recibo constantes quejas de proyectos que no se han efectuado?, dijo.
