Investigadores de la Policía Nacional Civil (PNC) recabaron evidencias; mientras, transportistas han informado que suspendieron el servicio por temor a sufrir más ataques.
Consultado un piloto, indicó que desde hace varios meses, son víctimas de los extorsionistas y que los dueños del transporte pagan de entre Q75mil a Q100mil al mes a un grupo de delincuencial de la capital; sin embargo, en los últimos días, otro grupo les exige otra cuota.
Autoridades informaron que el atentado lo cometieron dos hombres que se desplazaban en motocicleta y uno lanzó la granada hacia el predio.
Asalto reciente a bus
El martes último, una persona murió y dos resultaron heridas durante un asalto ocurrido en Siquinalá, en uno de las unidades de la referida empresa.
El hecho ocurrió en el km 84 de la ruta a suroccidente, cuando el transporte viajaba con unos 25 pasajeros y fue tomado por asalto por un grupo de delincuentes.
Relato de pasajero
“Dormíamos, cuando una voz fría dijo: Esto es un asalto”, relató uno de los pasajeros afectados, quien pidió resguardar su identidad y detalló que abordó el transporte en Patulul, Suchitepéquez, rumbo a la capital.
“Fue escalofriante escuchar esa voz tosca y fría, que dijo: No se muevan. En ese momento se escucharon algunos gritos y vi como los hombres se movilizaban entre los otros pasajeros, pero no pude ver cuántos eran, pues aún estaba oscuro”, añadió.
Agregó que luego de unos segundos, escuchó varias detonaciones de arma de fuego, por lo que se agachó para ponerse a salvo.
“No sé qué hicieron las demás personas, pero en ese momento solo pensé en protegerme y lamentar haber tenido que ir este día a la capital. Es lamentable la violencia que vivimos”, finalizó.
Otros pasajeros narraron que durante el asalto, el ayudante de la unidad de transporte decidió lanzarse, por lo que sufrió golpes y heridas. Posteriormente, Bomberos Voluntarios lo auxiliaron y trasladaron en estado delicado al Hospital Regional de Escuintla.
Luego de esto, los asaltantes obligaron al piloto del bus a detenerse en el referido lugar, donde bajaron y huyeron entre la maleza.