“Estamos mandando dos equipos a dos lugares distintos, uno en el departamento de Sololá y otro en el departamento de Totonicapán. Queremos investigar lo qué ocurrió, porque las informaciones con las que contamos hasta el momento son muy confusas“, agregó Brunoni.
El altercado se produjo en la Cumbre de Alaska, en el departamento de Totonicapán, aproximadamente a la altura del kilómetro 170 de la ruta Interamericana, “pero cómo había bloqueos de carreteras en ambos departamentos, queremos investigar en los dos”, explicó el representante.
Durante todo el día varios grupos de indígenas bloquearon varias carreteras para protestar por el alza de los precios de la electricidad y otros servicios.
Según los datos con los que cuenta la oficina, seis campesinos murieron y más de 41 personas resultaron heridas, entre ellas siete soldados.
Los fallecidos fueron identificados como campesinos indígenas de la etnia Quiché.
El presidente guatemalteco, Otto Pérez Molina, aseguró ayer que el enfrentamiento habría sido motivado por “civiles” que viajaban en un camión y que dispararon contra los manifestantes.
Según el gobernante, en ese lugar circulaban dos vehículos militares que iban hacia otro punto de esa zona para apoyar a las fuerzas antidisturbios de la PNC en el desalojo de otros manifestantes que bloqueaban carreteras, cuando desde otro camión que avanzaba delante de los soldados “empezaron a disparar“.
El presidente aseguró que los militares no portaban armas de fuego, y que solo llevaban equipos antidisturbios, por lo que descartó que éstos hayan disparado contra de los manifestantes. Sin embargo periodistas tomaron fotografías donde se ven aprecia a soldados armados.
Brunoni no descartó la posibilidad de que un grupo de civiles armados abriera fuego “para abrirse camino. Hay muchas armas circulando“, aseveró.