“Estamos muy preocupados por las acciones de las últimas horas. No se pude frenar la transición en Guatemala. Bernardo Arévalo va a tomar posesión como el presidente del país y los ataques a su partido, los ataques a la prensa, los esfuerzos para impedir una transición democrática son inaceptables”, expresó Nichols.
El jueves, un fiscal guatemalteco anunció que pedirá el retiro de inmunidad del presidente electo Arévalo, su vicepresidenta y legisladores del Movimiento Semilla, a quienes señala de haber hecho publicaciones en las redes sociales animando a los estudiantes a tomar la Universidad de San Carlos de Guatemala hace más de un año.
Así lo indicó en una conferencia de prensa el fiscal a cargo de la causa Ángel Saúl Sánchez, mientras se realizaban allanamientos en varias viviendas y se buscaba detener a más de 30 estudiantes universitarios miembros del partido Semilla, a un periodista y a un exprocurador de Derechos Humanos.
Aunque no detalló quiénes serían los sancionados, Nichols apuntó que el Departamento de Estado ya tiene identificadas posibles personas que estarían impidiendo la transición presidencial.
Nichols, además, hizo referencia a la resolución aprobada el miércoles en la Organización de los Estados Americanos, en la que se expresa una “grave preocupación” por la situación política en Guatemala y denuncia los intentos de la fiscalía de “desacreditar e impedir” la transición democrática.
“Refleja la preocupación de toda la región con la situación en Guatemala”, agregó Nichols.
El subsecretario agregó que “los que intenten impedir la transición democrática en Guatemala debieran de cesar esas acciones”.
Algunas de las sanciones que podría imponer EEUU, dijo Nichols, son sanciones económicas y sectoriales.
“Esa gente está tomando acciones que no van a llegar al fin que ellos quieren, lo que van a provocar son más condenas, más sanciones y más protestas en su propio país”, apuntó Nichols.
A finales de octubre, el gobierno estadounidense prohibió la entrada a su territorio a más de una decena de funcionarios y “otros actores de los sectores público y privado”, acusados por Washington de “socavar la democracia” y tratar de impedir la transición del poder a Arévalo.
Entre los entonces sancionados se encuentra la fiscal general de Guatemala, Consuelo Porras, a quien los allegados del presidente electo señalan que ha liderado varias maniobras legales para detener la asunción de Arévalo.
“Hemos implementado sanciones directas en el pasado y lo volvimos a hacer también con otras personas que están intentando impedir una transición democrática de en un país que ya ha elegido un presidente democrático con la observación internacional, que no cabe duda de que Bernardo Arévalo es el presidente elegido por los guatemaltecos”, concluyó Nichols.
[Con información de The Associated Press]