Guatemala

Culpan al FRG por inseguridad nacional

Grupos de la Sociedad Civil evalúan la actuación de la PNC, MP y la CSJ

A criterio de expertos en seguridad y justicia, el clima de violencia que mantuvo intranquila este año a la población guatemalteca, es responsabilidad directa del gobierno del Frente Republicano Guatemalteco, FRG.

Durante un desayuno de trabajo en la Redacción de Prensa Libre, representantes de la sociedad civil calificaron a 2001 como un año “espectacular para la impunidad”, y señalaron que el gobierno del presidente, Alfonso Portillo, “empezó dando este ejemplo al no tener voluntad” para combatir la corrupción en el Ejecutivo.

Los analistas coinciden en que el problema del alto índice delincuencial en Guatemala se debe a la ineficacia de la Policía Nacional Civil, PNC; Ministerio Público, MP, y el Sistema Penitenciario, así como la debilidad en el Organismo Judicial, OJ, y la Corte de Constitucionalidad, “supeditada al FRG”. Los participantes señalaron que no es casualidad que Guatemala tenga una de las tasas más altas de homicidios en América Latina, que se produzcan fugas masivas de reos, como la del 17 de junio pasado, y que sigan los secuestros y asaltos bancarios.

PNC, sin equipo

Roberto Villeda, del Centro para la Defensa de la Constitución, Cedecon, hizo ver que una de las debilidades de la PNC es la falta de equipo y el hecho de que “el Gobierno haya truncado el proceso de evolución y desarrollo” que se diseñó con la firma de la paz.

Villeda cuestiona el hecho de que al sector justicia se le haya asignado el 2 por ciento del presupuesto del Estado, mientras que al deporte se le otorgó el 3 por ciento.

?Un gobierno suave?

Alfonso Novales, presidente del Instituto de Derecho Constitucional, indica que el clima de impunidad se mantiene porque el sistema es una especie de “gelatina”, debido a la forma de actuar del gobierno “suave, tranquila y acomodada”.

“El hecho de que las altas autoridades justifiquen que sólo se jineteó Q90 millones de Gobernación, le da una idea a la población de que cualquier hecho delincuencial quedará impune”, agregó Novales.

Ana María de Klein, de Madres Angustiadas, reiteró que la inseguridad en el país obedece a la “ineptitud y falta de conocimiento de las autoridades del gobierno?.

Para Hugo Maul Figueroa, magistrado de la Corte Suprema de Justicia, CSJ, el balance del año en seguridad y justicia fue negativo, aunque resalta que hubo avances en la administración de justicia.

Figueroa estima que el año próximo será difícil, por la reducción del presupuesto al OJ?.

Falta de trabajo en equipo

Según el israelí Ury Roitman, especialista en seguridad, independientemente del equipo y recursos que no brinda el Gobierno a las instituciones, el problema principal sigue siendo la falta de trabajo en equipo.

Helen Mack, de la Fundación Myrna Mack, opinó que la criminalidad en Guatemala sigue vigente por el apoyo que le brindan estructuras militares incrustadas en el Gobierno, y que de alguna manera mantienen influencia en la CSJ, PNC y MP.

Eleonora Muralles, de Familiares y Amigos contra la Delincuencia y el Secuestro, calificó de lamentable que el Gobierno sea incapaz de fortalecer las instituciones para brindar seguridad a la población.

Para Alejandro Rodríguez Barillas, del Instituto de Estudios Comparados, uno de los factores que incide en la inseguridad del país es el incumplimiento de los acuerdos de paz.

Explica que dicha debilidad fortalece aún más al Ejército, que “mantiene una dosis del control político del país?.

Presupuestos para justicia

Según los sectores de la sociedad civil, el 2002 podría convertirse en un año difícil por la reducción presupuestaria en algunas instituciones que administran justicia.

A la Corte Suprema de Justicia, CSJ, le asignaron Q451 millones, casi 100 millones menos que el actual.

Según el presidente de la CSJ, Carlos Alfonso Alvarez-Lobos, dicha reducción afectará, al dejarse de construir por lo menos 30 edificios para tribunales de justicia, la cancelación de al menos 50 plazas bajo el renglón 0-29 y la remodelación de la torre de tribunales.

Al Ministerio Público le asignaron Q255 millones; Q5 millones menos que el actual presupuesto.

Según el Fiscal General de la República, Adolfo González Rodas, esta medida provocará la cancelación de más fiscalías en el interior del país.

Al Ministerio de Gobernación le asignaron Q1,352 millones, destinados al área administrativa y el funcionamiento de la Policía Nacional Civil y el Sistema Penitenciario, el sector más descuidado de la cadena de justicia.

Año violento: Inseguridad ciudadana

Cifras del Instituto de Estudios Comparados revelan que ocurren 102 muertes por cada cien mil habitantes en la ciudad de Guatemala.

Con esa cifra el país tiene la segunda tasa más alta de homicidios en América Latina, que sólo lo supera Colombia, que afronta un conflicto armado interno.

La estadística indica que sólo se maneja un nivel de efectividad en la persecución penal del 4.65%, es decir, que en casi el 96% de los casos no se logra ni siquiera detener a una persona por el delito de homicidio.

Según los sectores consultados, este nivel de impunidad es responsabilidad de la Policía Nacional Civil, y el Ministerio Público, que no lograron desempeñar de forma eficaz su papel en el curso del año.

Entre otros aspectos de corrupción y negligencia figura principalmente la fuga de 78 reos, de la Cárcel de Alta Seguridad de Escuintla, el 17 de junio último.

Las autoridades carcelarias hicieron caso omiso de una denuncia que hizo un día antes un agente policial, quien advirtió que le habían avisado sobre un plan de fuga en la granja penal Canadá, que está en el mismo sector de ?El Infierno?.

Sin embargo, según especialistas, la principal razón de la fuga masiva fue la poca atención del Gobierno para reestructurar el sistema penitenciario, el cual carece del equipo, los guardias son mal pagados e impera la corrupción.

En lo que va del año ha habido 19 asaltos bancarios y dos robos a agencias, lo cual coloca a Guatemala en el segundo lugar de esos hechos delictivos en Centroamérica.

Extraoficialmente, se cuantifican más de 15 secuestros importantes en el país y por lo menos 30 secuestros rápidos.

Guatemala también es señalada como uno de los países que sirve de puente y bodega al narcotráfico, principalmente para la venta externa e interna de cocaína, mariguana y amapola. Ese hecho ha convertido al territorio nacional en paso importante para trasiego de armas de calibre ofensivo.

ESCRITO POR: