El Tribunal de Sentencia de Cobán, Alta Verapaz, encontró culpables a Alfredo Caal, Celio Aparicio Ortiz y Esteban Quej, por asesinato, sedición, robo, lesiones graves e incendio agravado.
Los condenados escucharon la sentencia acompañados de una intérprete de q?ekchi?.
El fallo fue emitido un año y nueve meses después de haber ocurrido el linchamiento, y cinco días antes de que Martínez cumpliera 55 años de edad.
Tras casi dos meses de debate, el tribunal resolvió que los tres acusados cumplan 52 años de cárcel, inconmutables.
Además, deberán pagar Q50 mil por daños y perjuicios a Olga Lidia Juárez de Martínez y Hugo Martínez, esposa e hijo de la víctima.
Pruebas
En el debate se estableció que los tres condenados encabezaron a la turba, la cual se organizó con plena conciencia de los hechos.
El día de la captura, los sindicados estaban heridos de bala. La Policía estableció que resultaron lesionados el día en que ocurrió el linchamiento.
Se determinó que las heridas eran de bala y las había causado el juez Martínez, quien disparó en legítima defensa.
Además, fue encontrada sangre de dos de los detenidos en el lugar donde estaba el cadáver de Martínez.
El tribunal los responsabilizó de haber cometido ?actos de odio y venganza? contra el juez y los bienes del Estado.
Los jueces consideraron que quedó probada la forma violenta con que ocurrieron los hechos, porque se utilizaron por lo menos dos camionadas de piedras.
Además, se les condenó por haber causado lesiones graves a los policías Francisco Alvarado Rodríguez, Gaspar Caal Xol, Miguel Angel Canahí Pocop y Mario Rodolfo de León Ruiz, de la comisaría del lugar.
Ordena abrir proceso
El tribunal ordenó al Ministerio Publico, MP, abrir proceso contra el exministro de Gobernación Byron Barrientos; el exdirector de la Policía Nacional Civil Rudio Lecsán Mérida, y Hernán Heiselmen, exgobernador de Alta Verapaz, para establecer su responsabilidad penal en el hecho.
También, contra Francisco Javier Peniche, alcalde de Senahú, y Domingo García, un vecino del lugar.
Entre las pruebas, el MP presentó 10 órdenes de libertad numeradas del 748,389 al 748,398 robadas de la oficina del juez el día del crimen.
Satisfechos
La viuda de Martínez comentó que está de acuerdo con la sentencia, aunque, dijo que eso no cambia lo que ha sufrido por la muerte de su esposo.
?No me gozo de la sentencia, pero creo que el tribunal se apegó a Derecho, aunque faltan muchos por detener?, señaló.
Agregó: ?Se comprobó que esto fue premeditado; lo que más me duele es no haber estado en ese momento junto a él para ayudarlo?, dijo.
Mientras tanto, el hijo de la víctima dijo que continuarán con las acciones legales. Además, esperan que se obtengan resultados positivos de las pesquisas de la Fiscalía.
Celio Aparicio Ortiz, uno de los condenados, dijo: ?Espero que algún día investiguen bien quién fue el autor; el fiscal sabe quién fue. Nosotros somos inocentes, sólo Dios sabe qué pasó?, indicó.
Ministerio Público: ?Sentencia justa?
El fiscal del caso, Leopoldo Liu, dijo que la sentencia es justa, y que según la investigación, por considerar que hubo negligencia por parte de la Policía Nacional Civil y el Ejército en el linchamiento del juez Alvaro Hugo Martínez.
Agregó que aún están pendientes de ejecutarse 20 órdenes de captura por ese caso. Además, hace algunas semanas se detuvo a otras siete personas, a quienes se les acusa de haber participado en el crimen.
Entre ellos, Gregorio Xacal, locutor de la radio comunitaria Estéreo Senahú, a quien se le sindica de haber utilizado ese medio de comunicación para llamar a los vecinos del lugar a que hicieran ?justicia por sus propias manos?.
Miércoles trágico: Defendió su vida
La noche del 12 de marzo de 2001, el Juzgado de Paz de Senahú se vio irrumpido por una turba. ?¿Por qué lo soltó??, recriminaba al juez Martínez, en alusión a Pedro Cacao, a quien sindicaban de ?haber lazado como una res? a Vilma Yolanda Putul, de 8 años, desde un vehículo en marcha, y haberla arrastrado varios metros.
Al sentirse presionado, Martínez abrió fuego contra la multitud y aparentemente lesionó a tres personas.
La secretaria del juzgado, Claudia Elías, dijo en esa ocasión que el juez ?defendió su vida durante trece horas?, pero los disparos provocaron aún más la furia de los inconformes, quienes arremetieron contra él a pedradas y machetazos.
Agentes de la PNC que patrullaban el área se percataron de lo que ocurría y pidieron refuerzos, los cuales tardaron en llegar.
Luego de haber dado muerte al juez, la turba destrozó la subestación de la Policía, que en ese momento contaba con un efectivo.
No fue sino hasta las 10 horas de la mañana siguiente cuando llegó el primer contingente de la Fuerza Especial Policial.