De estos, uno se encuentra totalmente recuperado y dos están en proceso de recuperación, informó la cartera. De momento, ninguna de las personas que ha padecido el virus ha sufrido una complicación o se ha agravado.
Sin embargo, el Ministerio de Salud informó que todos se encuentran bajo monitoreo con el fin de mantener la situación bajo control.
El primer caso se detectó el 3 de agosto. Se trataba de un hombre de 31 años que, según informó el ministro de Salud Francisco Coma, tuvo contacto con personas extranjeras. El paciente no había salido de Guatemala, lo cual quiere decir que se contagió en territorio nacional.
Las autoridades de salud han informado que la viruela del mono se transmite de diversas formas. Entre las principales se encuentra el contacto directo o indirecto con fluidos corporales, secreciones en la piel, mucosas, sangre o por contacto con material contaminado. Los síntomas pueden ser desde leves a severos.
Algunos síntomas pueden ser fiebre de inicio súbito y de 38.5 grados Celsius o más, escalofríos, malestar general, dolor de cabeza y muscular, linfadenopatía – inflamación de ganglios linfáticos- y erupciones en la piel, en la cara, mano, pies, pecho, boca, genitales y el ano.
Esta enfermedad fue declarada como emergencia sanitaria a nivel global por la Organización Mundial de la Salud (OMS) debido a la presencia del virus en más de 70 países y el aumento de contagios.
Iris Cazali, infectóloga del Hospital Roosevel, en una entrevista que dio a La Red el 28 de julio, dijo que si las personas tienen alguna lesión en la piel, fiebre, malestar general y síntomas gripales, tiene que acudir con su médico para mostrarle cómo son esas lesiones y preguntar cuál es el tratamiento adecuado.
Añadió que esta no es una enfermedad únicamente de transmisión sexual, sino que se da por contacto con las lesiones de las personas infectada.