El velorio se lleva a cabo en una vivienda de la avenida Elena, en la zona 3 de la Ciudad de Guatemala, y el sepelio se efectuará el miércoles 27 a partir de las 9.00 horas, según se informó.
De acuerdo con el reporte del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), De Paz, de 23 años, murió a causa de un trauma craneoencefálico, es decir golpes en la cabeza, posiblemente sufridos mientras era arrastrada por la corriente.
Karla Roxanna era vendedora en el mercado La Terminal, donde vendía costales, bolsas, dulces, chicles y galletas, según cuentan sus conocidos.
Recuerdan que tenía tres hijos de 8, 6 y 1 año; sin embargo, ella solo vivía en el asentamiento con el más pequeño, cuyo paradero ahora es incierto.
Blanca Marisela Calderón, comerciante de La Terminal, dijo que conocía a Karla Roxana desde que era bebé.
“La conozco desde que era una niña. Conocí a su mamá y a toda su familia y era una niña muy educada”, recuerda Calderón.
La mujer lamentó el hecho y demandó más atención por parte del Gobierno para las familias más desfavorecidas.
Lo mismo reclama Xiomara Nineth Calderón, otra comerciante de La Terminal, quien dijo que le cuesta creer lo que le ocurrió a Karla Roxana.
“Era una buena madre, una buena vendedora y pues la sentimos mucho. Se venía a vender con su hijo”, relató Calderón, quien clamó porque aparezca el resto de los desaparecidos.
Socorristas aún buscan a 12 personas desaparecidas tras el desbordamiento del río.
“Desde tempranas horas del día de hoy (martes), reactivaron las operaciones de búsqueda, localización y rescate de personas desaparecidas, a consecuencia de la emergencia por el desbordamiento de río El Naranjo”, dijo a la AFP el vocero de la Coordinadora para la Reducción de Desastres (Conred), Rodolfo García.
El percance ocurrió en la madrugada del lunes cuando una fuerte crecida del río El Naranjo destruyó las viviendas en el asentamiento Dios Es Fiel, ubicado abajo de un puente vehicular.
La corriente a causa de las lluvias arrastró piedras, árboles, tierra y desechos y arrasó las precarias casas de la zona, construidas en su mayoría con láminas de zinc.
Aún permanecen desaparecidas unas 12 personas, de un total de 18 víctimas reportadas, entre ellas una decena de niños, según la Conred.
En las operaciones también apoyan tres instituciones con sus unidades especiales caninas.
Asimismo, las autoridades de la Conred, a cargo de la protección civil, continuarán con la evaluación de daños y análisis de necesidades, así como las condiciones de riesgo en la zona cercana.
Previa a esta tragedia, la actual época de lluvias en Guatemala, que se inicia en mayo y concluye en noviembre, había dejado 29 fallecidos, 2.1 millones de afectados, 10 mil 303 evacuados y severos daños en infraestructura.
Miles de ciudadanos de Guatemala, donde el 59% de los 17,7 millones de habitantes viven en la pobreza, se han visto obligados a construir sus hogares precarios en laderas de barrancos, en las márgenes de ríos y zonas inundables.
El déficit habitacional en el país es de unos dos millones de casas, según datos de la Cámara Guatemalteca de la Construcción (CGC) y la Asociación Nacional de Constructores de Viviendas (Anacovi).
Con información de AFP