Varias zonas como Chimaltenango y Sacatepéquez reportaron el fenómeno, mientras las autoridades afirmaron que el epicentro de los sismos fue en la zona cerca a Escuintla.
Los últimos movimientos sísmicos presentados en Guatemala han tenido esa zona como epicentro, concretamente en Nueva Concepción. En la página oficial del Insivumeh se tiene un espacio que presenta lo últimos movimientos sísmicos registrados.
La mayoría de estos se concentran en un punto específico del país, cercana a las costas. El último registrado fue este 9 de mayo a las 10:05 de la mañana y con una magnitud de 2.8.
Para entender la frecuencia de los temblores en esa zona y de la carga sísmica en Guatemala, Victor Tzorin, investigador y analista de señales sísmicas del Servicio Sismológico de Guatemala brindó detalles que explican las razones de estos fenómenos.
Tzorin dijo que la zona de Nueva Concepción de Escuintla ha presentado actividades sísmicas desde el año pasado, incluyendo las registradas este 9 de mayo, el viernes 6 de mayo y el de mayor impacto que fue a mediados de febrero del 2022.
“Realmente es un fenómeno sísmico bastante peculiar, ya que incluso se podría definir como “una secuencia sísmica“, sin embargo no es de extrañar que en las costas del país haya este tipo de actividades”, mencionó Tzorin.
BOLETÍN SISMOLÓGICO
09 de mayo 2022
INSIVUMEH, Desarrollo Geocientífico Para Todos #SomosINSIVUMEH #Guatemala pic.twitter.com/Hi6iqGf0aA
— INSIVUMEH Guatemala (@insivumehgt) May 9, 2022
Explicó que las actividades sísmicas pertenecen a la “zona de subducción”, un límite convergente en donde chocan dos placas tectónicas, en este caso, pasan por debajo de la placa del Caribe a una tasa de seis centímetros al año.
“Esto es si lo comparamos con el sistema de fallas Polochic-Motagua que es bastante conocida aquí en el país, donde solamente son dos centímetros por año“, mencionó el experto.
Ante este fenómeno, dice Tzorin, la zona de subducción se mueve cuatro veces más rápido. “Esto genera que el 70% de los sismos ocurran en ese sector”.
Tzorin explicó que el pico de actividad más alta se registró el mes de febrero, habiendo contabilizado más de 200 sismos, y con respecto a inicios de mayo se han contabilizado 20 actividades sísmicas.
Lea también: Video: hombre se salva de morir aplastado durante el temblor de 6.8 grados en Guatemala
El experto explicó también las medidas que están llevando a cabo, incluida el Insivumeh de poder notificar acerca de subsecuentes movimientos sísmicos a la población, concretamente a la ciudad capital.
“Estamos desarrollando de forma independiente proyectos de sistemas de alerta temprana, los cuales consisten en colocar sensores lo suficientemente cerca de donde ocurren los sismos y, como las ondas sísmicas se mueven a una velocidad mucho menor que por ejemplo un mensaje de texto o comunicaciones electrónicas, puede notificar áreas más alejadas del epicentro, como la ciudad capital”.