La ceremonia de entrega fue el 15 de febrero en un desayuno que se llevó a cabo en la ciudad de Seattle, Estados Unidos. Arrechea estuvo acompañada de su esposo -el también científico- Jalel Sager y su pequeña hija Aya de cuatro meses.
La guatemalteca junto con otras cuatro científicas de Sri Lanka, Kenia, Bangladesh y Yemen fueron reconocidas en la categoría de Mujeres Científicas en los Países en Desarrollo.
El galardón tiene el peso de sus investigaciones que han sido desarrolladas durante años y que ha inspirado a muchos.
“El reconocimiento y la visibilidad son aspectos importantes de una carrera científica. Estamos orgullosos y felices de poder darle a estas inspiradoras científicas el reconocimiento que se merecen: por su ciencia sobresaliente, su compromiso de construir un mundo mejor y su persistencia en circunstancias difíciles”, dijo la presidenta de la OWSD, Jennifer Thomson.
Parte de esas circunstancias a la que hace mención la fundación, es que las mujeres premiadas son originarias de países en donde no hay apoyo a los científicos y el acceso a la educación es precaria.
Arrechea creció en la colonia El Milagro, zona 6 de Mixco y dice estar orgullosa de haber pertenecido a una zona roja. “Estoy orgullosa de haber nacido en una familia con limitaciones económicas porque me enseñaron a luchar para salir adelante” cuenta en una charla Ted Talks en la que participó.
En 2018 fue nombrada una de las 50 Mujeres Desafiantes en América Central por la revista Estrategia y Negocios.
Las galardonadas fueron:
- Susana Arrechea de la Universidad San Carlos de Guatemala; en ingeniería química y nanotecnología;
- Champika Ellawalla Kankanamge de la Universidad de Ruhuna, Sri Lanka; en ingeniería ambiental;
- Chao Mbogo de la Universidad Metodista de Kenia; en informática;
- Samia Subrina de la Universidad de Ingeniería y Tecnología de Bangladesh; en ingeniería electrónica y nanotecnología; y
- Fathiah Zakham de la Universidad Hodeidah en Yemen; en bioingeniería y microbiología.
La investigación
Arrechea recibió su licenciatura en ingeniería química de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac) y trabajó allí como profesora de química física antes de cursar su maestría y doctorado en nanociencia y nanotecnología en la Universidad de Castilla-La Mancha, España.
Después de graduarse Cum Laude, trabajó como investigadora visitante en la Universidad de California-Berkeley como parte de un proyecto Fulbright Nexus sobre energía renovable, y más tarde en el Centro de Estudios de Biotecnología de la Universidad del Valle de Guatemala
La investigación de Arrechea se centra en las posibles aplicaciones industriales y ambientales de materiales como nanopartículas, nanotubos y grafeno, que pueden emplearse para crear materiales de construcción más sostenibles, en el tratamiento del agua y en dispositivos solares y otras soluciones de energía renovable.