Los Bomberos Voluntarios reportan que solo en la capital y municipios aledaños atienden un promedio diario de cinco accidentes de motocicleta, varios de esos son leves por lo que no trasladan a las víctimas a hospitales.
Los Bomberos Municipales atienden en promedio ocho accidentes diarios de moto en los principales sectores de la capital.
Los socorristas coinciden en que la mayoría de percances en moto ocurren en el Anillo Periférico y las calzadas La Paz, Raúl Aguilar Batres, Roosevelt y San Juan.
La mayoría de afectados son repartidores de comida rápida y mensajeros.
Al 11 de julio último estaban registradas en la Superintendencia de Administración Tributaria un millón 170 mil 896 motos, respecto al millón 87 mil 834 del 2015, a escala nacional.
Síndrome de latigazo
Un motorista resulta lesionado de varias maneras. Una es al ser atropellado o sufrir caídas por exceso de velocidad, pues según los bomberos, puede provocar una desaceleración rápida de velocidad que termina en un derrape sobre el asfalto o colisión.
Otra forma es el choque frontal o trasero que causa el síndrome del latigazo, el movimiento brusco de la cabeza hacia delante y luego hacia atrás. Esa sacudida provoca que el cerebro choque con las paredes del cráneo y deje inconsciente al motorista por varios minutos.
Las lesiones dependen de cómo sea la caída y la fuerza de la misma. Paramédicos explicaron que las lesiones ocurren en cráneo, rodillas y tobillos, especialmente cuando les cae la moto encima.
Materiales
Expertos aseveran que los implementos —cascos, coderas, guantes y rodilleras— no siempre amortiguan un golpe, por la calidad de los materiales. Por ello, recomiendan verificar que los cascos tengan sellos exteriores que garantizan la certificación internacional.
Agregan que los cascos de policarbonato son los más sencillos y deben reemplazarse constantemente, a diferencia de uno de fibra que centra la absorción de un golpe en un punto.