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¿Será suficiente la capacidad estatal para atender a población en inseguridad alimentaria?

El Maga tiene alimentos para atender a población en inseguridad alimentaria y casos de desnutrición aguda con raciones del programa regular, y tiene una reserva estratégica de granos básicos que solo puede usar si la situación se convierte en emergencia.

Reportaje  sobre  La Sequía en el Departamento de Chiquimula

Los pobladores de las distintas  aldeas ubicadas en el Departamento de Chiquimula quines perdieron  el total de sus cosechas  debido a la  falta de lluvia y el intenso  calor  que este fenomeno provoco, por lo cual los mas damnificados por la sequia fueron los habitantes  del corredor seco, por lo cual  sufren de hambruna ya que las cosechas de maíz y frijol y legumbres  se han perdido 

En la imagen Rosa Elena Molina, vecina de aldea Pitahaya, Chiquimula, junto a sus hijos muestral sus cultivos que se perdieron  por la falta de lluvia 

Foto: Edwin Bercián

Las actuales condiciones climáticas han dañado los cultivos de los agricultores de autoconsumo, con lo que se avecina una crisis alimentaria mayor en el país. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Desde hace semanas las familias rurales tienen problemas para alimentarse debido a la sequía, los incendios forestales y la intensa ola de calor que afectan sus siembras; pero los días más difíciles están por llegar.

Mientras tanto, las estrategias gubernamentales funcionan en la burocracia normal y no se activará una intervención de emergencia hasta que se declare una situación de tal extremo. Las reservas de alimentos se mantiene, y, según las autoridades, de utilizarse ingresarán más raciones para tenerla abastecida.

Las familias de muchas áreas rurales del país se encuentran en el período de hambre estacional —tiempo en que las personas se quedan sin reserva de alimento y tampoco tienen trabajo para conseguir dinero y comprar— que se extiende hasta agosto, y se prevé que después de los estragos del fenómeno El Niño, las lluvias, tormentas y huracanes que acompañan a La Niña aflijan aún más a la población en crisis y en emergencia alimentaria, situación en la que se encontrarían cerca de 4 millones de guatemaltecos.    

La asistencia alimentaria para estas familias es impostergable, como señalan pequeños agricultores que tienen escasos granos básicos en reserva, y de continuar las condiciones climáticas por otros 15 días estiman la pérdida total de lo poco que han logrado sembrar.

Casos de emergencia

El Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga), da asistencia alimentaria a través de la reserva estratégica de granos básicos, en la que actualmente tienen 72 mil 324 raciones surtidas con frijol, maíz y arroz, abasto suficiente para cubrir 40 días de alimentación para las familias. Están almacenadas en las bodegas del Instituto Nacional de Comercialización Agrícola (Indeca).

Según Klemen Gamboa, que dirige el Viceministerio de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Visán) del Maga, el producto caducará en mayo del 2025.

Estas raciones se reparten a población damnificada por emergencia y son para atender una crisis de inseguridad alimentaria.

La viceministra indica que para poder utilizar esa reserva tiene que ocurrir cualquiera de los siguientes escenarios: por una ley de orden público que declare la emergencia, por una emergencia alimentaria que se determine en el Consejo Nacional de Seguridad Alimentaria (Conasan).

También se puede hacer uso de estos productos por rotación del grano, pue este tiene un tiempo de vida de dos años y no puede permanecer en las bodegas más de ese tiempo. En este caso, Gamboa explica que, si no lo utiliza en ese período, deben usar ese producto para el programa regular y remplazarlo por nuevo, a fin de que siempre haya alimento disponible.

Hay otra vía por la que se puede utilizar la reserva de granos básicos y es una alerta que provenga del Sistema Nacional para la Reducción de Desastres, que active la función cuatro “Gestión de Alimentos” del Plan Nacional de Respuesta. Según Gamboa, esta se activó recientemente.

Intervención

Desde el 2 de abril el país se encuentra en alerta anaranjada por la crisis de los incendios forestales, y se activó la función cuatro para atender a familias afectadas por los siniestros en Alta Verapaz, con lo que el Maga podrá utilizar la reserva estratégica de granos básicos para apoyarlas, dice Gamboa.

Hasta el 23 de abril, la Conred reportaba en Alta Verapaz 165 hectáreas consumidas por el fuego debido a incendios forestales y no forestales, lo que dañó cultivos de los agricultores de autoconsumo.

Sin embargo, cabe recordar que en Alta Verapaz coinciden las peores cifras de desigualdad del país. Según la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi 2014), cinco de cada 10 habitantes están en condiciones de pobreza extrema, mientras que la mitad de la población infantil tiene desnutrición crónica, como refiere la Encuesta Nacional de Salud Materno Infantil (Ensmi 2014-2015), y este año el reporte oficial hasta el 27 de abril identificaba 820 casos de desnutrición aguda en menores de cinco años. Hay que sumar que para febrero pasado allí había 478 mil 389 personas en crisis y emergencia de inseguridad alimentaria aguda.

El departamento fue uno de los más golpeados por las tormentas Eta e Iota en 2020, daños de los que las familias aún no se recuperan, y las lluvias que se vienen con el fenómeno La Niña las hace más vulnerable a un escenario de hambre.

Carlos Galán, poblador del municipio de San Cristóbal Verapaz, menciona que “las plantas de milpa no prosperaron” por la sequía, y que “la falta de alimento ya se siente” en la región. Además, los precios de los productos en el mercado se incrementaron, lo que hace difícil a las familias poder comprarlos.

La crisis, añade, se complicará si la temporada de lluvia es intensa, por los deslaves y derrumbes que son un riesgo para las familias que habitan en lugares en alto riesgo.

Respuesta en pausa

“En el tema de inseguridad alimentaria y la desnutrición, tanto crónica como aguda, no puedo responder hasta que no haya el marco de activación”, dice Gamboa, y al darse, la respuesta por parte del Maga sería inmediata.  

Añade que “tiene sentido” tener una reserva estratégica de granos básicos para atender a población en inseguridad alimentaria por desastres naturales, como las tormentas Eta e Iota que ocurrieron en 2020. 

Sin embargo, el diputado Jairo Flores, integrante del Frente Parlamentario contra el Hambre, se pregunta para qué sirve tener las bodegas llenas de alimento si este no se entrega a población que tiene problemas para alimentarse.

“Vemos una crisis que está generando el incremento de familias con hambre y niños con desnutrición, ¿qué más emergencia que esa? Para nosotros existe ineficiencia, falta de coordinación, de planificación y falta de criterio”, dice el parlamentario.

“Los alimentos allí —en bodega— no nos sirven para nada, deben convocar de urgencia a un Conasan y plantear la necesidad del usarlos. Por tener bodegas estratégicas tenemos gente muriendo de hambre”, agrega.

Pero el uso de la reserva no se ha discutido en el Conasán. Según la Sesan, “la primera opción” para hacerlo es la declaración de la emergencia por medio de la ley de orden público, en un Estado de Calamidad en el que la Conred sería la encargada de coordinar la respuesta de atención a la población. 

“El Conasán puede conocer un informe de crisis alimentaria por eventos climáticos como resultado del monitoreo de cultivos del Maga, en donde se evidencie una situación que amerite una declaratoria de emergencia. Dado que esto no ha sucedido, se continuarán revisando diferentes fuentes de información para tomar una decisión inmediata”, indicó la Sesán.

Programa activo

El Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga) tiene disponible 29 mil 309 raciones de alimento como parte del programa regular de asistencia para entregar a población en inseguridad alimentaria, a hogares con niños en desnutrición aguda y para atender casos con medidas cautelares y judiciales.

Estas contienen frijol negro, arroz blanco, aceite vegetal, sal yodada, avena en hojuela, maíz en grano o harina, azúcar fortificada y mezcla de harina de maíz y soya fortificada. El producto cubre 30 días para una familia integrada por cinco o seis personas.

Para poder repartir estas raciones a los hogares afectados, el Maga necesita que la solicitud llegue a través de la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Sesán). Esta institución es la que depura los listados de los beneficiarios, según Klemen Gamboa, que dirige el Viceministerio de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Visán) del Maga.

A las familias con niños en desnutrición aguda se entregan tres raciones; por inseguridad alimentaria es una, mientras que por medidas cautelares y judiciales se acata lo que el juez ordene. Este año se han repartido 70 mil raciones.

Gamboa calcula un tiempo aproximado de 1.5 meses para que la asistencia llegue a los hogares. Para estos días se tiene planificada la entrega a familias en Alta Verapaz, Izabal, Retalhuleu y Totonicapán.

En proceso

La jefa del Visán refiere que, así como salen raciones de las bodegas del programa regular, ingresan más, y que en este momento están por recibir producto para responder a las solicitudes que haga la Sesán, pues no descarta que en los próximos días tengan más requerimientos para atender a población vulnerable.

Por inseguridad alimentaria y nutricional la Sesán ha recibido 25 expedientes de Quiché, Santa Rosa, Progreso, Huehuetenango y Baja Verapaz, listados que recibe de las Comisiones Municipales de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Comusan). Mientras que se ha hecho gestiones de cuatro expedientes para atender a 13 mil 661 familias en 52 comunidades de cinco departamentos. Están en revisión otros 21 documentos que incluyen a 50 mil 886 familias de Huehuetenango y Retalhuleu.

En el caso de desnutrición aguda han ingresado del Ministerio de Salud listados de 8 mil 32 familias a nivel nacional.

ESCRITO POR:

Ana Lucía Ola

Periodista de Prensa Libre especializada en temas comunitarios, con énfasis en Salud y Educación, con 17 años de experiencia. Reconocida con el Premio de Prensa Libre en categoría Reportaje, en 2019. Premio de la UPANA por Informar a la población guatemalteca sobre la realidad en nutrición y desnutrición en el país, en 2019. Diplomado El periodismo en la era digital como agente y líder de la transformación digital impartido por el Tecnológico de Monterrey.