En el artículo 12, del Reglamento para la Gestión Integral de los Residuos y Desechos Sólidos Comunes, indica que todas aquellas personas que produzcan residuos o desechos sólidos deberán separarlo al momento de su generación.
Sin embargo, en otros artículos se establecen normas que deben cumplir las municipalidades, así como empresas de recolección, clasificación, reciclaje y cualquier otro tratamiento que se pretenda dar a los residuos.
Del artículo 17 al 19 indica los requerimientos para los vehículos de recolección y transporte de basura. Entre las normas se encuentra que la carrocería de estos debe estar construida con materiales sólidos, resistentes a la corrosión. Tienen que garantizar la hermeticidad para que no haya derrames de los líquidos contaminantes que circulan en la basura, así como garantizar el transporte separado de los residuos.
Asimismo, indica que la recolección de los residuos y desechos sólidos comunes generados en las áreas públicas y privadas debe efectuarse como máximo cada 72 horas. Además, en el vehículo solo puede permanecer las personas necesarias para cada operación.
“Nos piden que los camiones recolectores de basura tengan un apartado para los desechos según su clasificación, pero no podemos hacerlo porque los desechos son demasiados. No tenemos espacio ni tiempo para estarlo haciendo”, expone Miguel Ángel Carrera, presidente y representante legal de la Gremial de Recolectores a nivel nacional.
“Nosotros comenzamos a trabajar entre las 3 y 4 am, por el tráfico y porque a veces el vertedero de basura maneja otros horarios. Entonces, no podemos tomarnos el tiempo para clasificar”, añade.
Además, indica que hasta el momento no han recibido ninguna instrucción o han sido consultados acerca de este Reglamento por lo que desconocen cómo se llevará a cabo y cuál es el rol que tendrán a partir del 11 de agosto.
Para Carrera, las instituciones que se encargaron de realizar el Reglamento debieron consultarlos debido a que ellos son vitales para el ciclo que tienen los desechos sólidos.
“Debieron ver lo que beneficia y perjudica a todos los actores involucrados en esta normativa. Lo que se trata es que el país gane y el trabajo se haga en orden. Las personas salen temprano de sus casas al trabajo y dejan la basura afuera. Si nosotros no pasamos rápido, los perros rompen las bolsas y se hace un desorden, por eso también hay que tomar en cuenta si a ellos les dará tiempo de estar separando sus desechos”.
Debido a estas incógnitas y falta de información acerca de cómo cambiará su trabajo a partir de que entre en vigor el Reglamento, Carrera indica que si se llega a establecer el acuerdo gubernativo 164-2021 irían a paro nacional para que sean escuchados.
“La salida que tendríamos si el Reglamento entra en vigor es irnos a paro, pero la población sería la afectada. Sin embargo, necesitamos exponer a las autoridades nuestro punto de vista, que vean que esta normativa no es tan sencilla de implementar”, añade.
Carrera indica que hasta el momento se ha acercado al Congreso de la República para pedir a la Comisión de Ambiente, Ecología y Recursos Naturales que cite al Ministro de Ambiente y Recursos Naturales para que sea cuestionado acerca de esta temática. Sin embargo, no ha tenido respuesta.
Se consultó al Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN) acerca de este tema, pero hasta el cierre de esta nota no se obtuvo respuesta.