El nuevo ministro de Salud, Carlos Enrique Soto, se puso el 15 de octubre como meta para que el país cuente con un hospital específico para atender a privados de libertad.
El anuncio lo hizo el funcionario después de terminar la reunión del Gabinete de Gobierno.
Soto explicó que el plan es readecuar un hospital ya existente, para no tener que construir uno nuevo, ya que eso tomaría mucho tiempo y recursos.
La propuesta ya fue entregada al presidente Jimmy Morales y al vicegobernante Jafeth Cabrera, por lo que espera que se logre la readecuación de un centro hospitalario.
Por seguridad, Soto no quiso especificar el lugar en que se encuentran las dos opciones que, dijo, están en análisis, pero dijo que debe estar “aislado”.
“Tiene que ser un hospital que tenga infraestructura y tiene que ser un hospital de la red, que lo tengamos de cierta forma aislado para atender a estas personas”, añadió, en referencia a los reos.
El ministro mantiene su postura de no recibir a reclusos en los hospitales nacionales, después del ataque armado en el Roosevelt.
“Es por seguridad y por estrategia. No podemos seguir arriesgando a la población guatemalteca”, expresó.
Mientras, el funcionario discute con su homólogo de Gobernación, Francisco Rivas, y autoridades del Sistema Penitenciario, detalles de la logística y cómo se hará para trasladar a los reos.