En este lugar se vivieron momentos tensos ayer, cuando la Policía Nacional Civil llegó a pedir que se abriera la ruta y no lo lograron.
El 10 de octubre, a mediodía, un contingente de las Fueras Especiales Policiales (FEP) de la Policía Nacional Civil (PNC) llegó al bloqueo ubicado en el Periférico, frente a la colonia Bethania, para solicitar que se permitiera el paso vehicular, debido a que el ministro de Gobernación, Napoleón Barrientos, dio la instrucción de desalojar esa área.
Los manifestantes mantienen cerrado el lugar desde el 9 de octubre, ya que es uno de los bloqueos que se llevan a cabo a nivel nacional para exigir la renuncia de la fiscal general María Consuelo Porras, el titular de la FECI Rafael Curruchiche y el juez Fredy Orellana.
Aunque prevaleció el diálogo, se vivieron momentos tensos. Las personas que mantienen el cierre rodearon a los agentes y algunos con motos impidieron que los agentes antimotines avanzaran, hasta que las autoridades decidieron retirarse del lugar.
Luego de varias mediaciones, los manifestantes acordaron liberar el paso de 17 a 18 horas, por lo que decenas de automovilistas y motoristas avanzaron hacia sus destinos. Durante la noche, el Periférico siguió bloqueado y pobladores organizaron actividades con las motocicletas, como competencias y acrobacias.
La mañana de este 11 de octubre el bloqueo continuó. Sin embargo, los manifestantes permitieron el paso vehicular durante lapsos de tiempo. Esto permitió que automóviles y motocicletas continuaran su ruta sin mayor problema.
Aunque el acuerdo duró varias horas de la mañana, alrededor de las 15 horas, los manifestantes indicaron que volverían a cerrar el paso por completo y no permitirían el paso de ningún vehículo debido a un acuerdo con autoridades ancestrales de San Pedro Ayampuc, autoridades Chortí de Camotán y Jocotán, y autoridades Garífunas, quienes tienen el bloqueo en la Calle Martí Parroquia zona 6.
Santos Alvarado, autoridad ancestral de Chuarrancho, expresó su admiración hacia los manifestantes de la Bethania por “la coordinación, valentía y acción pacífica” que demostraron el 10 de octubre cuando llegó la PNC a solicitar el desalojo.
Luego las autoridades ancestrales solicitaron que no se permita el paso de ningún vehículo, ya que esto sería una medida para hacer presión y así “rescatar la democracia de Guatemala”. También pidieron que se coordinen antes de permitir el paso de nuevo, ya que el transporte pesado que circuló en la mañana, estaría detenido en la Calle Martí.
Después de dialogar, los grupos acordaron coordinarse antes de permitir el paso vehicular otra vez. Por ello, los coordinadores del bloqueo en la Bethania decidieron cerrar el paso por completo y no abrir la ruta por lapsos, así como lo hicieron durante a mañana.
En ambos bloqueos se acordó que seguirán permitiendo el paso a cuerpos de socorro y personal de salud debidamente identificados.
Las autoridades ancestrales enfatizaron en mantener la actitud pacífica y trabajar unidos. Debido a los infiltrados que se han denunciado en los distintos bloqueos, recomendaron tener grupos de vigilancia para controlar a estas personas y no caer en provocaciones.
Diálogo con PNC en la mañana
Alrededor de las 8 horas, agentes de la PNC y la Procuraduría General de la Nacional (PGN) llegaron al lugar para hablar con los manifestantes. “Nosotros lo que queremos es que todo sea una manifestación pacífica, no estamos en contra de que manifiesten, tienen todo el derecho”, dijo un agente policial.
Las autoridades pidieron que no se tenga presencia de menores de edad en los bloqueos. Entre los acuerdos que lograron este 11 de octubre fue habilitar el paso cada hora.
Otra de las solicitudes que hizo la PNC el 10 de octubre fue mover el tráiler que impedía el paso en dirección sur, sin embargo, aunque en ese momento los manifestantes no accedieron. Este miércoles el vehículo fue retirado, pero usaron otros objetos para impedir el paso.
El oficial Juan Monroy, de la PNC, también llegó al lugar para solicitar a los manifestantes que permitieran el paso de tráilers que estaban varados en la colonia Tikal 1, zona 7. Al inicio del diálogo los manifestantes indicaron que no podían dejar que vehículos grandes pasaran debido a que otras personas habían instalado plásticos para hacer sombra en el bloqueo, por lo que al pasar tráilers o camiones grandes destruirían la instalación.
Pero, después de varios minutos de diálogo, acordaron que dejarían pasar únicamente 20 vehículos de transporte. Estos, al pasar frente a los manifestantes, les agradecieron tocando la bocina.
Luego, se vivieron otros minutos de tensión ya que más transporte pesado se acercó al lugar para pasar, lo que molestó a las personas que estaban en el área ya que ese no había sido el trato. Sin embargo, volvieron a dialogar con la PNC y la situación continuó bajo control hasta que horas de la tarde informaron que impedirían el paso nuevamente.
