En conferencia de prensa el viernes 5 de enero, autoridades del Ministerio de Salud y del hospital afirmaron que trabajaban para restablecer el fluido eléctrico y que la atención a los pacientes se mantenía y para ello usaban generadores de energía. También pidieron apoyo a otros hospitales para la atención.
Este lunes 8 de enero, el procurador de los Derechos Humanos, Alejandro Córdova, emitió un comunicado en el que manifestó que “con profunda preocupación y solidaridad hacia las familias afectadas” desea expresar “su más sincera empatía ante los hechos ocurridos en el Hospital General San Juan de Dios”.
Afirmó que desde el 3 de enero han “estado monitoreando de cerca la crítica situación del hospital, afectado por severas fallas en el suministro de energía eléctrica”.
Lamentó: “Es desolador constatar que el sistema eléctrico, con una vida útil de 20 años, haya sido forzado a funcionar durante 40 años, resultando en aproximadamente mil quinientos metros de cableado en deplorables condiciones. Esta situación no solo es inaceptable, sino que también refleja una negligencia inadmisible hacia la seguridad y el bienestar de los pacientes”.
Según Córdova, “a pesar de los esfuerzos realizados por una empresa privada y la EEGSA para instalar generadores en áreas críticas, y de continuar brindando atención en el área de consultas, la realidad es que algunos pacientes tuvieron que ser trasladados a otros hospitales”.
“Estamos realizando verificaciones exhaustivas respecto a los casos presentados y asegurar que se tomen las medidas legales correspondientes. Además, hemos abierto un expediente desde el 4 de enero para asegurar una diligencia adecuada y efectiva”, afirmó.
Hizo un llamado a las autoridades del Ministerio de Salud y al director del hospital para que se priorice la garantía de servicios de salud de calidad y se busquen soluciones integrales a la problemática del Hospital General San Juan de Dios.
“Es nuestro deber moral asegurar que tragedias como esta no se repitan y que se respete el derecho fundamental a la salud y la vida de cada ciudadano”, según el procurador.
El 6 de enero, el Hospital General San Juan de Dios por medio de un comunicado informó que a partir de ese día el servicio eléctrico había sido restituido en todos los servicios del hospital, con lo cual el funcionamiento del centro asistencial dejaba de depender de las plantas eléctricas activas de manera provisional.
Afirmó que las consultas externas son atendidas con normalidad desde este lunes 8 de enero y continúan con las cirugías selectivas programadas.
Informó que el sistema de cableado de más de 1 mil 500 metros fue sustituido de forma adecuada, lo que permitió la restitución de energía eléctrica en todo el hospital.
Aseguró que la atención en todos los servicios médicos continúa de manera normal a los pacientes internos y externos.