Édgar Guerra, defensor del Usuario del Transporte Público, también estaba invitado al programa, pero no asistió.
Como asociación, ¿cuál es su opinión respecto del subsidio y la posibilidad de un alza al pasaje?
El transporte urbano ha venido con problemas de toda la vida; primero porque no se toman las medidas correctivas apegadas a la realidad, dos porque se politiza el servicio, y tres porque el Estado no ha cumplido con ciertas cuestiones que debe cumplir.
El país económicamente no está bien… nosotros prestamos un servicio de orden público y necesitamos la atención que merecemos como prestadoras de este servicio, tal como lo garantiza la Constitución.
Pero este último año ha sido el de mayor crisis en el transporte, porque a la fecha el Gobierno solo ha erogado el subsidio correspondiente a enero.
Hemos estado en diálogo con la Municipalidad de Guatemala desde hace muchos meses viendo la posibilidad de que haya un reajuste tarifario.
¿Hicieron ustedes una solicitud al Congreso de ampliar el subsidio de Q35 millones?
De todos es conocida la problemática del país de mayo a la fecha. Entonces se dieron los problemas con el Ejecutivo y entró el nuevo gobierno. Nosotros le hemos pedido varias audiencias al señor presidente —Alejandro Maldonado—, pero hasta la fecha no hemos podido hablar con él.
En el Transurbano se trabaja a través de una tarjeta electrónica; pero en el caso de los buses que no usan este sistema, ¿es por falta de coordinación?
Si quisiéramos controlar esta situación y pusiéramos los equipos de prepago a estas unidades, lo podemos hacer, pero el servicio de rojas con sistema de prepago a Q1.10 duraría tres días, porque allí estaríamos cobrando el Q1.10 que dice la ley, pero los ingresos no rebasarían los Q600 —de la operación diaria—. Son Q400 de diésel y Q200 de pago a pilotos, sin poner las prestaciones laborales.
La Municipalidad afirmó que no habrá un incremento a la tarifa…
Nosotros lamentamos mucho esa actitud de la Municipalidad de no querer afrontar la verdadera situación del transporte. Ellos probablemente no tienen necesidad de ajustar sus tarifas, pero si vamos a hacerles cuentas, ellos están operando con números rojos, a pesar de que en estos dos últimos años el Gobierno les ha otorgado Q150 millones al año. Eso les permite operar sin necesidad de tener un reajuste.
¿Van a dejar de operar si no tienen eco sus peticiones?
Derivado de esta situación se pusieron las mantas para que el pueblo se entere, para que el alcalde Álvaro Arzú reaccione y nos permita dialogar. Nosotros no estamos diciendo que quiten el subsidio, que lo den, pero directamente al usuario o que lo maneje cualquier otra instancia.
No podemos operar con Q35 millones, el Transurbano es muestra de un esfuerzo que se ha hecho por parte de los transportistas. Estos buses son negocios netamente privados; el Gobierno no ha invertido ni un solo centavo en estos buses.
¿Por qué seguir en un negocio que les ha representado pérdidas?
Nosotros, de hecho, desde junio para esta fecha tenemos más de mil unidades fuera; nuestra flota era de tres mil 150 unidades, hoy no hay más de dos mil circulando en las calles, o sea la gente se está retirando porque ya no tiene medios como seguir.