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Nueva ley de vacunación en Guatemala garantizaría inmunización gratuita y no obligatoria

Este martes se espera de que quede aprobada la Ley de vacunas, que surgió en 2015 como una propuesta de médicos y sociedad civil, misma que fue aprobada y vetada en 2022, y que en un segundo intento busca la aprobación de los diputados en el Congreso de la República.

Campaña de vacunación contra el Sarampión donde participa el Ministro de salud Carlos Soto.

Fotografía. Erick Avila:               30/08/2019

Este martes se espera que sea aprobada la ley de vacunación, iniciativa 6081, que busca garantizar la vacunación a toda la población, sin obligatoriedad y de manera gratuita. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

El próximo sábado 26 octubre termina la jornada de vacunación contra la poliomielitis y el sarampión que el Ministerio de Salud implementó para inmunizar a niños que no las han recibido, pues las coberturas están por debajo del ideal 95%. En ese contexto se espera que este martes 22 de octubre en el Congreso se discuta por artículo y redacción final la ley de vacunas, la iniciativa 6081. Este será un segundo intento por aprobar la normativa.

El camino para que Guatemala tenga una ley que garantice el acceso universal a programas de inmunización en el país comenzó en el 2015 con la iniciativa 5342, que fue aprobada el 1 de febrero del 2022, pero que un mes después el presidente Alejandro Giammattei vetó con el argumento de que no velaba por los principios de equidad e igualdad y que involucraba a entidades que no tenían relación con el Plan de vacunación.  

Este año se comenzó a trabajar en una nueva iniciativa, la 6081, que se presentó al pleno del Congreso en febrero pasado, y en mayo recibió el dictamen de la Comisión de Salud para comenzar con los debates. Según la agenda legislativa, este martes 22 podría convertirse en ley, y para los médicos que han colaborado en el proceso esto sería un logro para el país, como lo indica el infectólogo pediatra Mario Augusto Melgar Toledo, miembro del Consejo Nacional de Prácticas de Inmunización (Conapi).

¿Qué impacto ha tenido en la salud, especialmente de los niños, el que se aplazara por nueve años la aprobación de la ley de vacunas?

Siendo una intervención de salud tan importante, que salva y que mejora la calidad de vida de los seres humanos, sin una ley no podemos asegurar que la vacunación se implemente, tal como ocurrió en el 2014, cuando hubo desabastecimiento de vacunas por falta de financiamiento y que llevó a cobertura vacunales muy bajas y provocó que más niños fueran vulnerables a enfermar. Lo otro, es que se pone en riesgo el que no se cumplan los planes de vacunación existentes.

Una ley de vacunas ayuda a mejorar la cobertura de vacunación. Desde antes de la pandemia las tasas de vacunación han sido bajas y necesitamos herramientas para mejorarlas. Además, hay una serie de nuevas vacunas que podrían estar disponibles para los guatemaltecos. Tener una ley nos da la palanca para asegurar que tendremos las vacunas que necesitaremos en el futuro.

¿Cuáles son los puntos importantes que cubre esta ley? 

Un punto es asegurar el financiamiento para las vacunas, pues hay antecedentes de que el dinero de las vacunas se ha usado para algo distinto y eso es un problema. De hecho, las vacunas están financiadas, pero queremos que ese recurso quede asegurado de aquí al futuro.

Lo otro es contar con un grupo técnico qué asesore al Ministerio de Salud en todos los temas relacionados a vacunas. Hay autoridades del ministerio muy capaces y que pueden tomar las decisiones, pero contar con un comité asesor ha demostrado que da respaldo a las decisiones, y de que estas sean mejor informadas, más adecuadas y transparentes.

También se habla del liderazgo del Ministerio de Salud en el tema de vacunas. Tenemos muchos esquemas de vacunas y muchas entidades vacunando, lo que está bien, pero la ley refuerza el liderazgo que el ministerio debe tener en el tema de inmunizaciones. Se incluyen otros temas importantes, como asegurar la vigilancia de las enfermedades prevenibles por una vacuna, los efectos adversos asociados a estas y tener un registro del esquema de vacunación unificado. 

La ley de vacunas ya había sido aprobada y fue vetada por el presidente Alejandro Giammattei, ¿Qué garantiza que esto no vuelva a suceder?  

En esa ocasión se mencionó mucho el tema de obligatoriedad de la vacunación, lo que realmente no estaba en esa ley ―la vetada― y tampoco está en esta. En esta iniciativa, la 6081, nos aseguramos de que no hubiera nada que pusiera en duda que la vacunación es voluntaria. Tomamos en cuenta el que no aparecieran instituciones que en el veto decía que no debían estar, pues generaba dudas. Se cuidó bastante el que en esta versión de la ley no se incluyeran. 

¿Cuál ha sido el involucramiento de los médicos en la iniciativa 6081?

La ley original, que es prácticamente la base de la iniciativa que ahora buscas aprobarse, fue propuesta por el Conapi, con apoyo del Osar (Observatorio de Salud Reproductiva) y de asociaciones científicas. Realmente esta ley nace de la sociedad civil y en el Congreso la tomaron los diputados, quienes han tenido el cuidado de solicitar nuestras recomendaciones para cambios que se le han hecho. Nos hemos involucrado desde su concepción, pues prácticamente es una iniciativa ciudadana y ahora está en manos del Congreso. 

Jornada intensa
Este sábado 26 de octubre se cumplen 85 días de que el Ministerio de Salud comenzó con una intensa jornada de vacunación contra la poliomielitis (OPV) y el sarampión (SPR) para alcanzar con una dosis adicional a niños entre 2 y 5 años, que nacieron entre 2019 y 2022. Se puso como meta vacunar a un millón 397 mil 429 menores.
Datos oficiales indican que un millón 230 mil 037 han recibido la SPR, y un millón 230 mil 580 la OPV, con lo que las coberturas llegan al 88.02% y 88.06%, respectivamente. Lo ideal, según la Organización Panamericana de la Salud / Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) es que estén en el 95% o más.

¿Qué esperarían que suceda con esta iniciativa de ley?

Esperaríamos que se discuta y redacte por artículo, y que sea aprobada por unanimidad, como sucedió con la ley anterior.

Esta es una ley que busca asegurar la vacunación de los más necesitados. Las personas que tienen la posibilidad de vacunarse por su cuenta lo hacen y está bien, pero lo que necesitamos es que quienes no tienen acceso a ellas, que son los más vulnerables a enfermar por padecimientos prevenible por vacunas, tengan la seguridad de que serán vacunados. Además, la ley permite la seguridad de qué vacunas tener y cuándo empezar a aplicarlas, qué los cambios en el esquema de vacunas sean basados en la mejor evidencia.

Esta ley da la apertura para tener nuevas vacunas en el esquema regular, ¿Cuáles podrían incluirse en el corto plazo? 

Para el próximo año esperamos contar con algunas vacunas nuevas, y la ley asegura que entren de una forma ordenada y transparente. ¿Cuáles tendremos en el futuro? Las vacunas contra dengue y contra virus sincitial respiratorio, estas dos pueden tener un impacto enorme en los guatemaltecos. Hay otras que también están disponibles, como las vacunas contra el neumococo, contra tuberculosis y contra hepatitis A. Son las que esperamos se introduzcan pronto y la ley ayudará a seguir los pasos para una introducción adecuada y transparente. 

El Ministerio de Salud implementó una jornada intensa para mejorar las coberturas de vacunación contra la polio y el sarampión. ¿Si se contará con una ley estaríamos en los niveles adecuados?

Las razones de la disminución de la vacunación son multifactoriales, sin duda, una ley nos hubiera dado una herramienta más para evitar esa disminución de coberturas y esperamos que sea una herramienta para subirlas. Estamos claros en que una ley no es suficiente, hay que cumplirla para que funcione. Es una herramienta que se ha utilizado en muchos países, en América Latina solo Guatemala y República Dominicana no cuentan con una ley de vacunas como tal, todos los demás consideran que la vacunación es tan importante que merece su propia ley. 

ESCRITO POR:

Ana Lucía Ola

Periodista de Prensa Libre especializada en temas comunitarios, con énfasis en Salud y Educación, con 17 años de experiencia. Reconocida con el Premio de Prensa Libre en categoría Reportaje, en 2019. Premio de la UPANA por Informar a la población guatemalteca sobre la realidad en nutrición y desnutrición en el país, en 2019. Diplomado El periodismo en la era digital como agente y líder de la transformación digital impartido por el Tecnológico de Monterrey.