Mirna Montenegro, directora del Osar, indicó que “no hay esperanza” para estas niñas, debido a que la pobreza en que viven se ha agravado, solo dos continuaron sus estudios, casi la mitad tiene otro hijo, a pesar de no desearlo, y tres de los recién nacidos fallecieron.
Además, una de las madres contrajo zika cuando estaba embarazada y el bebé nació con microcefalia y murió.
“Encontramos que la respuesta del estado es nula para ellas ya que ninguna tiene algún tipo de protección del Ministerio de Desarrollo Social a pesar de vivir en situación de pobreza”, precisó Montenegro.
Tampoco tiene información de salud sexual y reproductiva y después de haber tendido a su hijo ninguna ha asistido a un servicio de salud para algún control.
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Según Montenegro en las niñas “hay sentimientos frustración, decepción y no hay ningún plan de vida en ellas”.
Las menores cuyo caso fue analizado radican en distintos departamentos, incluso en áreas cercanas a la metrópoli.
El análisis, llamado Vidas robadas, reveló que 13 adolescentes se dedican exclusivamente a cuidar a los hijos, seis además de cuidar a los niños tienen un trabajo y ocho indicaron que si no fueran madres seguirían estudiando y su vida sería normal.
El Osar reveló que solo este año han nacido mil 535 niños cuyas madres oscilaban entre los 10 y 14 años; además, 21 mil 778 de menores de 15 a 17 años. Alta Verapaz, Guatemala, Huehuetenango, Quiché y San Marcos son los departamentos de mayor prevalencia.
Los números no disminuyen respecto a años anteriores.
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Todo en la teoría y nada en la práctica
Montenegro criticó la excesiva lentitud y burocratización de las instituciones del Estado para atender a una niña que se convierte en madre y que “en teoría todo está, pero no en la práctica”.
Añadió que existe una mesa de atención integral desde el 2012 coordinada por la Secretaría contra la Violencia Sexual y Trata de Personas (Svet) donde están involucradas varias instituciones, pero no se operativizan las acciones que en ella se plantean.
Citó como ejemplo que el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) tiene un programa llamado Vida que se creó para apoyar con un aporte de Q1 mil 500, ocho veces al año, a las niñas de ciertas edades que se convierten en madres; sin embargo, solo tienen ingresadas a 61 menores cuando desde el 2013 hasta el 2018 hay más de seis mil casos.
En respuesta el titular del Mides explicó que el programa está orientado a la atención de niñas de 10 a 14 años cuyos casos “han sido judicializados” y que para poder ingresar se necesita cumplir con ciertos requisitos y corresponsabilidades, que muchas veces no se cumplen.
Niño murió en el bus
Otro ejemplo de la falta de atención del Estado para estas niñas madres, añadió Montenegro, se dio hace tres semanas, cuando el hijo de una menor de 13 años contrajo pulmonía y en un hospital de Jutiapa le indicaron que tenían un padecimiento cardiaco por lo cual debía llevarlo al hospital Roosevelt, y en vez de llevarla en una ambulancia solo le hicieron la orden de traslado.
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La familia de la niña se tardó seis semanas para juntar el dinero para traer a su niño a la capital, pero ya fue muy tarde puesto que el bebé murió en el bus cuando venía desde Jutiapa.
“¿Por qué no la llevaron en una ambulancia hasta el hospital Roosevelt?”, cuestionó la directora de Osar, quien afirmó que tuvieron que pedir apoyo psicológico para la menor porque ella repetía que por su culpa había fallecido su hijo.
“Salud atiende el parto y después de eso nadie se preocupa por el futuro de la niña y su recién nacido”, agregó.
La organización propone para mejorar la agilidad de la asistencia a las menores, que los programas se descentralicen y se involucre la comunidad, las municipalidades y las iglesias porque son las que conocen más de cerca la situación de las niñas.
Hay avances
Gabriela Sandoval, directora contra la Violencia Sexual de la Svet, indicó que la mesa técnica que aborda los embarazos en niñas menores de 14 años ha tenido “muchos logros”, por ejemplo, el diseño de la ruta de abordaje en donde la menor, en un mismo espacio, recibe atención médica y se procesa la denuncia en el Ministerio Público.
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Además, citó al programa Vida del Mides como uno de los grandes logros de la mesa, puesto que existía desde el 2014, pero no se había implementado. También que ya dentro de ese programa las menores pueden tener oportunidades educativas a través del Ministerio de Educación.
La mesa está conformada por los ministerios de Salud, Educación y Desarrollo Social; además, por la Procuraduría General de la Nación y el Ministerio Público.
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