Formación social y política
Nació el 22 de noviembre de 1930, hijo del nicaragüense Edelberto Torres Espinoza, profesor de profesión, exiliado por ser opositor de los Somoza, radicado en Guatemala con la pena de ser encarcelado si regresaba a su país.
Su aporte a las ciencias sociales le valieron el reconocimiento más allá de las fronteras guatemaltecas. Mucha de su obra se publicó en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), pero también dedicó algunos años a la academia, por ejemplo, fue el secretario ejecutivo del Consejo Superior Universitario Centroamericano, en Costa Rica.
Su bagaje intelectual lo deja en muchos libros, investigaciones, ensayos e innumerables publicaciones en diarios guatemaltecos y en el extranjero, donde dejó ver sus ideas sobre la sociedad y los caminos para un mundo mejor.
En el ámbito político fue militante de la izquierda ideológica. Fundó la Alianza para la Juventud Democrática, durante el gobierno de Jacobo Arbenz Guzmán (1951-1954), estuvo exiliado en México luego de la contrarrevolución y luego regresa a Guatemala y se integró al Partido Guatemalteco del Trabajo (PGT).
A continuación, una entrevista que brindó a Prensa Libre en julio de este año, donde esboza parte de su pensamiento crítico, lúcido y encaminado a una sociedad más equitativa, donde también aprovecha a señalar los débiles orígenes de la política guatemalteca y sus consecuencias contemporáneas.
¿Cuál es la principal crisis de los partidos?
Que en realidad no son partidos. Para que lo sean tiene que haber un sistema político formado por el Tribunal Supremo Electoral y las estructuras políticas trabajando por lograr cambios, pero no ha habido participación efectiva libre porque todo ha sido pagado.
Cuando la elección pasa, la persona se va a su casa. En cambio, cuando existe un verdadero partido, después de perder sigue trabajando; falta continuidad.
¿Hay partidos de derecha y de izquierda en el país?
Lo que sucede aquí pasa en todo el mundo, aunque talvez es menos agudo el debate o la identificación. Por supuesto que hay, pero durante cien años no hubo política porque estuvo prohibida por los militares, a quienes no les gustan las elecciones. Entonces ¿qué cultura podría haber? Incluso hasta el pueblo se considera conservador.
Muchos países organizaron el Estado con base en el trabajo industrial, entonces los actores son trabajadores y empresarios, pero aquí fueron durante mucho tiempo agricultores y campesinos analfabetas, a los que casi no se les pagaba. Entonces, construir una estructura política en estas condiciones no es posible; sin embargo, hay izquierda y derecha.
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En la actualidad hay unos cinco partidos de centro derecha, conservadores, que están tratando de captar a los electores, pero no definen los problemas sociales. Hablan de educación, de salud, pero la cuestión social es saber decir: para terminar con esta situación de pobreza, que se reproduce en cada generación, hay que tener una política de largo plazo.
Pero en el país la izquierda no levanta vuelo.
Porque fue derrotada durante la guerra interna, y la represión de los años de 1970 y 1980 la acabó físicamente. Entre ellos 27 intelectuales de la Universidad de San Carlos fueron asesinados, quienes valían muchísimo. Ha sido muy débil, pero estamos formando un partido social demócrata que yo definiría de centro izquierda, y en las próximas elecciones nos mediremos para ver quién es quién en el debate ideológico, siempre y cuando las elecciones muevan esa cultura. Vamos a vivir un periodo nuevo que va a requerir mucho conocimiento y sabiduría de los políticos para que cumplan sus promesas y ofertas.
El @PDHgt @JordanRodas lamenta profundamente el sensible fallecimiento del ilustre sociólogo Edelberto Torres Rivas y presenta sus más sentidas condolencias a sus familiares, amigos y colegas. pic.twitter.com/B7IhGBoLOa
— PDH Guatemala (@PDHgt) December 31, 2018
¿Por qué en otros países como El Salvador y México lo han logrado?
Porque —en el país— la han perseguido —a la izquierda— y después de la represión continuó el control. En las primeras elecciones de 1985 se eligió un partido de izquierda —Democracia Cristiana Guatemalteca—, pero nunca se dijo así. La organización de Vinicio Cerezo no era un partido conservador, tenía una ideología y buenos candidatos.
¿Por qué siempre gana la derecha?
Porque practica el clientelismo de la manera más descarada. Nosotros hemos recorrido el interior, encontramos grupos de campesinos donde solo uno habla y dice: estamos con doña Sandra porque ella nos da tamales los fines de semana.
Tampoco ha habido condiciones para que la izquierda participe. Cuando quiso hacerlo lo hizo de manera violenta y perdieron. Cuando terminó el conflicto armado, la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca fue incapaz de trabajar como en partido político. Entonces nunca ha habido uno fuerte. Primero porque la población es conservadora, y segundo porque la izquierda es inútil, nunca ha podido ordenarse. Se organizan y luego se dividen en grupos.
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Si los partidos pequeños quieren ganar las elecciones tienen que plantear una alianza; si no, nada. Hace un tiempo había un proyecto de unir a tres grupos de izquierda, pero no aceptaron, cada uno quería ser el jefe y cada grupo era de unas 20 personas.
Dentro de un año ya tendremos a los dos finalistas presidenciales del proceso eleccionario.
¿Cómo ve el panorama?
Las próximas elecciones van a tener varios puntos nuevos, y eso hace que uno se pregunte cómo irán a ser finalmente.
Estará la Ley Electoral de Partidos Políticos con cambios, no como queríamos, pero la estructura de la votación va a cambiar. Van a haber partidos nuevos. No se sabe si habrá un candidato militar, pero se conoce que hay un partido castrense formándose, el cual podría ser muy grande y con mucha plata. O sea que vamos a tener sorpresas.
Trayectoria
- Torres-Rivas estudió Ciencias Jurídicas en la Usac y una maestría en Sociología en Chile.
- Ha hecho investigaciones sociales en Chile, México, España y Costa Rica.
- En 1996 regresó al país después de haber permanecido exiliado durante varios años.
- También se ha dedicado al análisis político.
Reacciones
“Doy gracias a la vida por haberme permitido conocer a un intelectual de la talla de Edelberto Torres-Rivas. ¡Edelberto, gracias por la amistad y el honor de haber sido su editor!”, escribió el editor y expresidente de la Gremial de Editores, Raúl Figueroa Sarti.
“Un adiós para Edelberto Torres Rivas, gracias por su enorme legado intelectual y humano”, publicó Javier Payeras, escritor y gestor cultural.
“¡Hasta pronto mi amado amigo! ¡Acá te cuidamos la vida!”, dijo la escritora Anabella Giracca.
Resalta legado
Claudia Dary, investigadora del Instituto de Estudios Interétnicos de la Usac, dijo que Edelberto Torres Rivas ha sido uno de los científicos sociales más fructíferos que ha tenido Guatemala, por su investigación social y docencia.
Destacó que este guatemalteco destacó a escala latinoamericana. Añadió que Torres dejó bastante para la posteridad. “Él fue investigador y docente del posgrado centroamericano de la Flacso. También asesoró varios trabajos”, expresó.
“A nivel general sus obras son conocidas y de consultas en las universidades”, destacó.
Dary dijo que el intelectual aportó directrices para tratar el tema de la desigualdad en Guatemala y la falta de integración económica del istmo.
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