Esto a pocos metros del último derrumbe suscitado el 24 de agosto en el kilómetro 61.3 con dirección a occidente, en el que se continúan los trabajos de limpieza y del que se han obtenido pocos avances, ya que aún se encuentra obstaculizado uno de los carriles.
En el lugar no se observa ningún tipo de señalización o autoridades de seguridad regulando el paso a los conductores.
Los carriles al occidente son dos los que continúan bloqueados y uno está habilitado con este derrumbe; sin embargo, se descarta el poder seguir utilizando el carril reversible por la cantidad de personas que transitan en el lugar.
Hasta el momento, las autoridades no se han pronunciado con respecto a este nuevo derrumbe sobre el Libramiento de Chimaltenango.