Además, el suelo del área recreativa se ha desnivelado y esto es un riesgo para los estudiantes.
De acuerdo con los padres de familia del centro de estudios, durante años esto ha representado un fuerte peligro para los estudiantes, así como para el personal y los vecinos.
Polo Jiménez, padre de familia, señala que teme a que la ceiba caiga sobre las instalaciones de la escuela, debido a una plaga que deteriora progresivamente la planta.
“Las raíces han levantado el pavimento, han botado las paredes de los sanitarios de los niños y se hizo otra construcción para evitar el peligro, pero aún se presentan daños, ya que la raíz tiene una especie de plaga que lo está deteriorando, por lo que en algún momento el árbol podría derribarse completamente”, asegura el padre de familia.
Por otro lado Ivonne Flores, madre de familia muestra preocupación por el suministro de agua potable dentro de la escuela, ya que dice que la ceiba ha reventado algunos tubos.
“Ya tiene un par de años que ha afectado el agua potable porque revienta tubos. Se han suspendido clases porque no hay agua en los años debido a la situación de la ceiba”, indica la madre de familia.
Durante la época lluviosa, el riesgo aumenta. Luis Rodríguez, vecino de esta escuela, asegura que las ramas caen con fuerza sobre el techo. Además, las hojas tapan los tragantes y la humedad invade las paredes.
“Una de las cosas que más preocupa es que ya se han caído ramas de gran tamaño. En una ocasión, nos provocaron un daño en la estructura de la lámina. Nos preocupa que en algún momento caiga una rama lo suficientemente grande que pueda dañar las habitaciones y a las personas que viven en ellas”, explica Rodríguez.
Ante el temor de que el problema crezca, los padres de familia y vecinos piden a las autoridades competentes tomar cartas en el asunto.
Postura
Ante la problemática del centro educativo, el Ministerio de Cultura y Deportes dio su postura respecto a las acciones que llevaron a cabo dentro del establecimiento.
De acuerdo al ministerio, en noviembre de 2022, el Departamento de Conservación y Restauración de Bienes Culturales (Decorbic), de la Dirección Técnica del Instituto de Antropología e Historia (IDAEH), se apersonó al lugar a realizar una visita de campo y, posteriormente para hacer las evaluaciones del entorno.
“El Decorbic recomienda que se hagan las intervenciones correspondientes al inmueble, que sí ha sido afectado por el crecimiento de la ceiba, y medidas de intervención correctiva a la ceiba, no para cortarla sino para mejorar su forma, a cargo de los especialistas del Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap), ente rector en esta materia”, explica el ministerio.
También añade que los trabajos que se lleven a cabo tanto en el inmueble como con la ceiba se “socialicen con la comunidad”.
“Es decir, los vecinos para indicar cómo se llevará a cabo el mantenimiento correctivo de la ceiba como los trabajos de restauración del inmueble”, señala el ministerio.