“Son pocos los que ayudan a la gente de la calle, pero de todo corazón recibo esto —las cobijas— y agradezco a quienes nos mandaron los ponchos”, refirió López.
Cobijas de Amor surgió hace 11 años para ayudar a los guatemaltecos damnificados por la tormenta Stan. Este año, cientos de personas donaron 18 mil prendas, de las cuales se repartieron ayer más de mil 600. Hoy y mañana se entregará el resto en casas hogares para niños y ancianos.
“Somos una familia”
En los alrededores del Hospital General San Juan de Dios se calcula que pernoctan 50 personas. La temperatura promedio por las noches suele bajar bruscamente en las madrugadas. En la 9a. calle A y 1a. avenida, frente al ingreso a la sala de urgencias del centro asistencial duermen cada noche unos 35 indigentes. Ese es el lugar en el que más gente se queda a la intemperie.
“Cuando toca dormir en la calle, hay que aguantarse el frío y la inseguridad. Por eso dormimos en grupos grandes, porque nos cuidamos y somos una familia”, señaló Mindi Aguilar, 25, una de las indigentes que pernoctan en esa área.
Aguilar agradeció a las personas que regalaron las cobijas: “Esto me hace sentir bien. Sé que hay gente que nos aprecia, nos manda las sábanas y abrigos para no sufrir de frío, o no morir congelados —hipotermia—”.
Leonel Antonio Méndez, 27, e Ismael González Ríos, 36, duermen junto a su perro, Angie, a quien conocieron en la calle hace un año frente al mismo hospital. Duermen en grupos para protegerse de agresiones o actos vandálicos.
Abandono
En la zona 4 de la Ciudad de Guatemala también hay varios lugares en los que personas duermen por las noches.
La vía 5 y ruta 4 es una de las áreas que se convierten en improvisados dormitorios.
Gerson Estuardo Estrada, 19, busca refugio en ese sector. Junto a otros jóvenes, Suele llegar casi todas las noches, pero es frecuente verlo inhalar solventes químicos que guarda en frascos de vidrio.
“Llegué solo a la capital a los 11 años, luego de huir de Sanarate porque me querían matar debido a robos que cometí junto a mi papá. Pero antes de salir huyendo me quedé sin familia, mi mamá me abandonó y a mi padre lo mataron por ser delincuente”, relató Estrada, quien recuerda, aún bajo los efectos de las drogas que consume, el nombre de su madre: “Mi mamá se llama Leslie Estrada Lima, y sé que se fue para El Salvador”.
Familia migró
El Paseo de la Sexta, que durante el día es un lugar de concurrencia de compradores y transúntes, ve convertidos varios rincones en refugio donde indigentes intentan dormir.
José Méndez, 40, es una de las personas que cada noche acomoda sus cartones y duerme junto a una de las persianas de tiendas.
“Yo me quedé sin familia. Mis hermanos están en Estados Unidos y dejaron de contactarme. Luego de que perdí mi trabajo y el amor de mis familiares, solo trato de sobrevivir”, relató.
La Sexta Avenida y 14 calle de la zona 1 es el lugar favorito de Méndez para pernoctar, debido a que enfrente está la sede del Ministerio de Gobernación y confía en que los delincuentes no lo agredirán mientras duerme.
A todas las personas entrevistadas se les entregaron frazadas y suéteres donados.
Personas que duermen en la calle corren riesgos.
- La Municipalidad de Guatemala calcula que hay 300 indigentes en el Centro Histórico.
- Hasta octubre de este año se registraron 29 agresiones violentas contra personas sin hogar.
- Se reportaron 18 muertes de indigentes en el mismo período.
- La Policía Nacional Civil aumentó el resguardo de las personas que duermen en la vía pública del Centro Histórico.
- La comuna capitalina, efectuó un sondeo en el 2005, y dio a conocer que en el Centro Histórico había 10 lugares en los que pernoctan indigentes. Harán otro estudio, pero no se sabe cuándo.
- Para ayudar a indigentes y personas que son cuidadas en refugios, cientos de personas acudieron a las oficinas de Prensa Libre a donar frazadas.
- En la campaña Cobijas de Amor se entregan suéteres, pantalones, chumpas y frazadas.
- Hoy y mañana se completa la entrega de prendas en hogares para niños y personas de la tercera edad.