infraestructura
Invasiones y cambio de diseño complican reactivación de Puente Belice II
Para poder reanudar el proyecto, se busca entablar conversaciones con personas involucradas en las invasiones y además, realizar cambios que modificaran el diseño original de la construcción.
El Puente Belice II estará suspendido hasta que se resuelvan los cambios de diseño y problemas de riesgo. (Foto Prensa Libre: Captura de video)
El proyecto de construcción del Puente Belice II se encuentra suspendido desde el 1 de mayo. En este momento, el futuro lo condicionan cambios que se quieren introducir en el diseño de la obra, estructuras aledañas en riesgo, temas legales por resolver y pendientes de derecho de vía por donde pasa el trazo.
Según Foscolo Liano, gerente general del Grupo Muratori S.A, la empresa ejecutora, se están realizando cambios en el contrato por los que tampoco se puede avanzar con la construcción. Estas modificaciones se deben a variaciones en el diseño que cambiarán el propósito original del proyecto. Asimismo, Liano indicó que algunos tramos del proyecto han sido invadidos, por lo que se deben comenzar con conversaciones para reubicar a los que se encuentran instalados en el lugar.
El Puente Belice II comenzó como un proyecto para alivianar el tráfico que en estos momentos, se hace en el Puente Belice I y crear una vía alterna entre la zona 6, la zona 17 y toda la zona norte, explicó Cecilia Pivaral, quien es parte de la mesa de infraestructura de la iniciativa Guatemala No se Detiene, quien agregó que el proyecto es importante puesto que más del 25% de personas viven en la zona norte capitalina.
Pivaral argumentó que este proyecto –el cual se ha visualizado de esta manera desde 2016–, estaba destinado a ser multimodal, puesto que el área en la que se ubica ha requerido, desde hace tiempo, generar mayor conectividad. La integrante de Guatemala No Se Detiene puntualizó que por el momento, la zona está limitada por los accesos del Puente Belice I y los puentes a través de zona 1 y el anillo periférico, los cuales ya cuentan con una cantidad considerable de vehículos al día.
Liano aseguró que actualmente, no se han retomado operaciones, sin embargo, añadió que se creó una mesa técnica para entablar conversaciones con todos los involucrados y establecer de esta manera los puntos que se van a definir para seguir con el proyecto. Pivaral explicó que se han llevado a cabo 1 o 2 reuniones, y que todavía se encuentran en discusiones para descubrir los posibles escenarios para proceder de manera legal en los cambios de diseño del proyecto.
Cambios e invasiones
Liano mencionó que se busca cambiar el diseño para que se realice el paso del tren de carga sobre el puente, la no inclusión vehicular, el paso del metro y hacer algún tipo de ciclovía o pasos peatonales. Esto cambiaría el origen del proyecto, el cual estaba pensado para que los vehículos también pudieran transitar, argumentó Pivaral.
Del mismo modo, aclaró que esta construcción en su modelo original, era parte de una estrategia que buscaba la creación de transporte público masivo y generar conectividad. "Se buscaba proveer acciones que generaran conectividad hacia el sector norte, para que en un futuro, con otros proyectos, se pudiera hacer un libramiento desde el sur de la ciudad hasta la carretera al atlántico", indicó Pivaral.
Sin embargo, todavía no están resueltos estos cambios. Liano aseguró que dependen en gran medida de la mesa técnica creada. “En esa mesa se incluyen también algunos abogados, porque involucra el contrato, personal de la empresa y de ferrovías”, explicó el gerente general de la empresa. Además de esto, Liano aseguró que a pesar de no poder estimar un tiempo para que se reanuden las operaciones, sí se está tratando de llegar a un consenso.
Además del cambio de diseño, Liano expresó que se han tenido problemas con personas que han invadido algunos sectores del proyecto y han instalado su vivienda en el lugar. El gerente general de la empresa indicó que esos derechos de vía son por parte del ferrocarril, por lo que deben desalojar de acuerdo a la ley. Según Liano, ya se están realizando conversaciones con las personas para que se cambien de sitio y den el paso adecuado.
Participantes del proyecto
El viceministro de Infraestructura Alejandro García recalca que los cambios también se están realizando para tomar en cuenta a otros participantes del proyecto y enumeró las entidades que tienen que ver con el proyecto: el derecho de vía le pertenece a Fegua, el usufructo es de Ferrovías y la protección del Puente Las Vacas esta bajo jurisdicción del Ministerio de Cultura y Deportes. Según García, esta es la razón de agregar un tren de carga, debido al usufructo de Ferrovías.
Pivaral indicó que la intención de análisis está relacionada con mantener el contrato y que el monto debería mantenerse pero cambiando los alcances. “Lo que quieren es trabajar los mismos recursos que estaban asignados a este proyecto”, aseguró Pivaral. García argumentó que cualquier cambio que se haga dentro del contrato, afectará directamente el monto del presupuesto y costo del contrato. No obstante, cabe recalcar que, según el artículo 52 de la ley de contrataciones del estado, el valor de los contratos puede ampliarse o reducirse solamente un 20%.
García aseguró que aún no se han llegado a las pláticas sobre el presupuesto, puesto que se encuentran todavía en la fase legal y contractual, sin embargo, reiteró en la necesidad de hacer las decisiones de forma colectiva, lo cual era algo que en la planificación original no se estaba realizando, puntualizó García.
Problemas de riesgo
El viceministro de infraestructura argumentó que la pausa del proyecto también se debe a una notificación por parte de la Conred, la cual enfatiza en un alto riesgo de desplome del puente Las Vacas. García explicó que el Puente Belice II estaba planificado para construirse a un costado del puente Las Vacas, no obstante, por las probabilidades de desplome de este puente, se corre el riesgo de dañar la infraestructura del proyecto.
En estos momentos, según García, se están realizando los estudios pertinentes para no comprometer la construcción. “Estamos haciendo las consultas para tomar la mejor decisión de cómo se va a abordar este proyecto”, afirmó el viceministro. Además de esto, reiteró en la necesidad de hacer un análisis técnico que permita darle solución a este proyecto para no correr ningún riesgo y de esta manera continuar con el proyecto.
García, además, detalló que la mesa técnica en la que se están realizando las conversaciones, se creó hace dos semanas aproximadamente, por lo que todavía tienen conversaciones pendientes sobre los estudios que permitan resguardar también los intereses del estado. Añade: “Existe un riesgo latente y no podemos arriesgar los fondos de los guatemaltecos, y tampoco vidas humanas”, sentenció el viceministro. “Si no hay factibilidad de llevarlo a cabo, nos tendremos que ver en la obligación de disolver el contrato”, agregó García.