De esta manera, cambiaron el punteo necesario para bajar de alerta roja a alerta anaranjada. Además, ahora se incluye el porcentaje de personas vacunadas por municipio para medir el nivel de alerta.
También, las autoridades cambiaron los límites de aforos en lugares públicos, aunque estos siguen dependiendo del nivel de alerta.
Entre los detalles que destacan es que el tiempo de duración de una misa o un servicio religioso está regido por el color de alerta del municipio en el que se encuentra. Si es rojo, no puede durar más de una hora.
Otro cambio relevante tiene que ver con los velorios y entierros, que dependen ahora de la razón del deceso.