De acuerdo con los religiosos que integran la junta directiva de la Conferencia Episcopal, Guatemala atraviesa situaciones difíciles, principalmente en temas relacionados con la administración de justicia, pues hay “dudas y sospechas” de cómo es que está se maneja en el país, incluso, mencionan que algunas instituciones han sido “penetradas por el narcotráfico”.
“Vemos las necesidades de nuestras comunidades y nos hacemos solidarios con aquellos que más han sufrido las consecuencias de la pandemia y los otros males que nos aquejan. Nos hiere la desigualdad social, el manejo deficiente de los recursos y la rampante corrupción”, señala la Conferencia en un comunicado.
Además, el retraso en la elección de los 26 nuevos magistrados titulares y suplentes de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y 225 de Salas de Apelaciones, quienes debían haber sido electos en 2019 y tomado posesión el 13 de octubre del mismo año, es un tema que llama la atención de la Iglesia Católica, puesto que la renovación de cortes es trascendental en la lucha contra la corrupción en Guatemala.
“Tenemos una Corte Suprema de Justicia que debió haber sido reemplazada, por imperativo constitucional expreso, hace más de dos años. No haberlo hecho constituye una flagrante desidia de quienes debieron haber cumplido con su responsabilidad constitucional”, refiere la Conferencia Episcopal en su comunicado.
Añade que “urge acelerar con honestidad la elección de magistrados y de fiscal general y cumplir con los plazos para su designación. Urgen legisladores que fortalezcan un sistema de justicia que retome leyes olvidadas y exigidas por la Constitución de la República e implemente nuevas leyes necesarias”.
La Conferencia Episcopal también destaca que los procesos de postulación de candidatos a fiscal general “requieren de la participación de los mejores profesionales, dispuestos a arriesgarse, por amor a Guatemala y por la búsqueda de la justicia”, por lo que demandan a los integrantes de las Comisión de Postulación que “actúen con independencia y profesionalismo recordando que las consecuencias de la impunidad son graves y que la no aplicación de la ley y la justicia provoca más violencia”.
Señalan que habrá candidatos a fiscal general señalados o que puedan “tener vínculos con situaciones de crimen”, por lo que el proceso es complicado.
También muestran preocupación por persecución penal en contra de jueces y exfiscales que han trabajado en temas relacionados con la corrupción.
“Hay un ambiente claro de duda y de sospecha, por no decir palabras más fuertes, de que el modo en que se está operando hoy la justicia no se corresponde con el modo que debiera hacerlo. Creo que una cosa son las intenciones o declaraciones que se puedan dar, pero por sus frutos los conoceréis, dice el evangelio”, señaló Gonzalo de Villa, presidente de la Conferencia Episcopal y arzobispo metropolitano.
Giammattei se aleja
Agregó que la relación con el presidente Alejandro Giammattei para tratar esos temas ha sido inexistente en los últimos tiempos y que les nos preocupa el tema de justicia y la corrupción; además, considera necesario entablar un diálogo entre sectores de la sociedad “que creemos que las cosas no están bien y en ese sentido tenemos que participar.
Por su parte el Cardenal Álvaro Ramazzini dijo: “Yo a partir de alguna experiencia en la que verifiqué que no se podía tener un diálogo decidí cortar toda relación con el presidente (Giammattei), pero lo hago a título personal, pero a nivel institucional hay una disponibilidad siempre de buscar el bien común”.
En tanto, Víctor Hugo Palma, obispo de Escuintla, se refirió a la corrupción en el sistema de justicia y dijo que “es una tarea pendiente, el gran problema, por lo menos de la región de dónde vengo, es que hay mucha penetración de la influencia del narco en los medios judiciales, poderes que nosotros creemos que no existen porque no se ven, pero justicia retardada es justica negada, cuando más bien se dice justicia pronta y cumplida que es el lema de la Corte Suprema. No todos los jueces son corruptos, pero aquellos que lo hacen dejan una mancha muy grande de desesperación y frustración”.