De acuerdo con el Sistema Nacional de Huracanes de Miami, Florida, el fenómeno que avanza en el Caribe tiene del 40 a 60 por ciento de posibilidades de convertirse en depresión tropical; no obstante, el Insivumeh considera que solo se dejarían sentir los efectos secundarios.
De momento no tiene nombre puesto que se le asigna hasta que se convierte en una tormenta tropical.
“Recomendamos a la población que tenga precaución por —posibles— deslizamientos e inundaciones y lahares de la cadena volcánica, y a Conred (Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres) que estén pendiente de información del Insivumeh para saber si los sistemas se fortalecen”, puntualizó Culajay.
Áreas de saturación
David de León, portavoz de la Conred, precisó que, según el mapa de humedad del Insivumeh, es en Chiquimula donde hay niveles desde el 70 al 100 por ciento en algunos municipios, “debido a las lluvias que se ha presentado en este departamento”.
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En la costa sur, hay áreas que van del 50 al 70 por ciento de saturación, mientras que en Petén los porcentajes son similares.
Respecto al occidente del país, cuyas áreas suelen ser muy proclives a deslizamientos y derrumbes, de León manifestó que la humedad alcanza el 70 por ciento, aunque en áreas costeras y Retalhuleu llega al 75.
“En realidad, todo el país se considera siempre peligroso al tener lluvia constante”, expuso el portavoz de Conred, quien añadió que la institución monitorea los dos fenómenos climáticos, principalmente el que se moviliza sobre el Atlántico que podría fortalecerse en las próximas 24 horas, por lo cual le tienen una vigilancia especial.
A causa de la temporada de lluvias, la Conred se mantiene en alerta amarilla institucional.
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Temporada
A pesar de que el presente año ha sido uno de los que menos ha llovido y en el cual gran parte del país se vio afectado por una canícula prologada que en ciertas regiones tardó 60 días, la lluvia no ha dejado de causar daños.
Conred registra que en todo el año se han producido 340 incidentes que han afectado a 713 mil personas y han damnificado a cuatro mil 986. Las lluvias han dejado ocho fallecidos, cuatro heridos y una persona desparecida.
En cuanto a la infraestructura, se contabilizan cuatro mil 985 viviendas con daños, desde leves hasta severos; 105 carreteras y 15 puentes afectados, de los cuales tres quedaron destruidos; además, 10 escuelas dañadas y 59 viviendas que permanecen en riesgo.
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