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Estos son los riegos de respirar aire contaminado por el incendio en AMSA
El inhalar el humo provocado por el incendio en el vertedero de AMSA afecta principalmente a niños y a adultos mayores.
El humo que provoca el incendio en el vertedero de AMSA puede causar problemas respiratorios en la población. (Foto Prensa Libre: Carlos Hernández)
El incendio en el vertedero del km 22 de la ruta al Pacífico que comenzó el domingo provocó una nube de humo que limitó la visibilidad y esparció un olor a basura quemada que abarcó varios kilómetros alrededor. Esas partículas químicas generadas por el siniestro son perjudiciales para la salud pulmonar; los niños y las personas de la tercera edad son los más vulnerables.
De acuerdo con el médico Edgar Beltetón, pediatra y especialista en cuidaos intensivos y enfermedades respiratorias, la quema de basura produce una mezcla de gases y partículas pequeñas en las que se identifican monóxido y dióxido de carbono, óxidos de nitrógeno -NOx-, y compuestos orgánicos volátiles que “son terriblemente tóxicas” para el ser humano.
El Instituto Nacional de Sismología Vulcanología Meteorología e Hidrología (Insivumeh) reporta que la calidad del aire captada por la estación de monitoreo en la ciudad de Guatemala es “muy mala”, según el Índice de Calidad de Aire (ICA) calculado con la metodología de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA). Advierte que puede ser dañina para la salud.
“Conforme el ambiente se empieza a enrarecer y a mezclar este humo tóxico, los procesos básicamente agudos respiratorios podrían ser las primeras manifestaciones (en las personas) en perímetros cercanos al vertedero de basura”, dice Beltetón.
Los niños con problemas de asma -entre el 8% al 12% de la población infantil la padece- son altamente vulnerables a estas condiciones de contaminación, que se conoce como hiperreactividad bronquial de la vía aérea.
“Cada vez estamos viendo población infantil con más enfermedad respiratoria. Decimos que los virus son los que están atacando, pero estos tienen un nicho ideal cuando hay un fenómeno inflamatorio en el niño, y si este se llama asma bronquial y con la contaminación ambiental hay mayor grado de inflamación. Esto para el virus es el nicho ideal para provocar inflamación y enfermedad”, dice el médico.
Así que los menores con asma, los que han tenido bronquitis recurrente, con bronquitis bacteriana prolongada, con tos crónico y que roncan, los prematuros con displasia broncopulmonar por el uso de oxígeno al nacer, son más vulnerables a complicaciones respiratorias, así como las personas con enfisema pulmonar, que tienen lesión cardíaca y también los adultos mayores, son los más vulnerables.
“Ahora vemos más enfisema pulmonar en el adulto sin que hayan fumado, simplemente porque son pacientes que desde niños no se han controlado sus problemas respiratorios, se vuelven crónicos y están haciendo enfisema pulmonar”, dice Beltetón. La contaminación en el ambiente, como la quema de basura que se da en el vertedero que tiene a su cargo la Autoridad para el Manejo Sustentable de la Cuenca y del Lago de Amatitlán (AMSA), es un factor que lleva a esta condición.
Por otro lado, las personas sin antecedentes de problemas respiratorios, como asma, también pueden afectarse con el humo del incendio.
“Alguien ‘sano’ siempre vas a tener exposición a factores bioquímicos ambientales que le están deteriorando, la famosa rinitis alérgica es más una rinitis vasomotora por inflamación del tejido de la nariz”, dice el neumólogo pediatra, condición que podría ser provocada por factores ambientales.
De acuerdo con el médico, el tener vertederos en áreas cercanas a las ciudades afecta la salud pulmonar, no solo de los que habitan a escasos kilómetros, sino que representa un daño para la población en general.
“Todo esto nos ha causado una lesión pulmonar y de ahí que nos preguntamos, y por qué la tos crónica y por qué tanta enfermedad respiratoria, pero si tenemos un basurero que nos está enfermando, eso es algo peliculezco, tener un basurero adentro de una ciudad”, agrega.
Beltetón aconseja el uso de mascarilla para evitar cualquier complicación respiratoria que pueda causar la inhalación del humo que genera el incendio del vertedero de AMSA. La recomendación es utilizarla hasta que el índice de contaminación descienda y que el basurero se deje de quemar.
Sin embargo, esta es una medida de emergencia, la solución es “más profunda” e involucra a las autoridades ambientales, añade.
Medidas de protección
El médico José Waldemar Castillo González, jefe del Área de Neumología del Hospital General de Enfermedades del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) de la zona 9, señala que inhalar el humo puede provocar irritación en las vías aéreas superiores y dificultar la respiración, además que la concentración de monóxido de carbono, por ejemplo, puede llegar al torrente sanguíneo de la persona y causar problemas mayores.
Las recomendaciones que hace a la población, principalmente a las que viven cerca donde ocurrió el siniestro, es cerrar puertas y ventanas y colocar trapos mojados en las rendijas para evitar que ingrese el humo a las casas. Indispensable usar mascarilla.
Si fuera posible, que las personas se retiren temporalmente el área afectada, pues, aparte del humo que resulta dañino respirar, hay partículas y sustancias que se depositan de manera gradual en el ambiente que también son peligrosas.
“Los residuos pueden permanecer por semanas y por meses. Esas partículas quedan en las mesas, en ventanas, paredes, techos, y mientras no se limpien los van a respirar”, dice Castillo González.
Otra de las recomendaciones que las personas se hidraten y que cubran las vías respiratorias. Se aconseja también proteger a las mascotas de la casa.
Ante cualquier malestar respiratorio que se presente por la mala condición del aire, los médicos sugieren consultar inmediatamente en los servicios de salud.
Suspensión de clases
Debido a los niveles de contaminación que se registran debido al incendio, el Ministerio de Educación tomó la decisión de suspender las clases presenciales este lunes 8 de abril en los establecimientos públicos, privados, municipales y por cooperativa de los departamentos de Guatemala y Sacatepéquez.
La medida también fue adoptada por las universidades de San Carlos de Guatemala, Rafael Landívar y Mesoamericana.
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