De acuerdo con Lorena Gobern, directora de Epidemiología y Gestión de Riesgo del Ministerio de Salud, los padecimientos gastrointestinales son el principal detonante del síndrome.
Hasta ahora, en 39 pruebas de laboratorio efectuadas a pacientes sospechosos de tener el síndrome se encontró una serie de enteropatógenos —microorganismos— que pueden estar asociados con la enfermedad. De estas, 16 dieron positivo a la bacteria campylobacter, mientras que en el total de las muestras se detectó E. coli, informó la funcionaria esta semana, durante una citación en el Congreso.
Es en ese punto se cuestiona la calidad del agua a la que tienen acceso los guatemaltecos, pues ese podría ser el vehículo por el cual llegaron dichas bacterias a los pacientes.
El agua como foco
Hasta el martes recién pasado, salubristas de Cuyotenango, Suchitepéquez, en donde se detectó la mayoría de los casos de la enfermedad neurológica aguda, enviaron al Laboratorio Nacional de Salud siete muestras de agua para su análisis físico-químico, con el objetivo de establecer la calidad de este recurso en ese lugar.
La cartera de Salud también informó que vigilan los niveles de cloración del agua. para que esté en los parámetros adecuados y así “evitar cualquier contaminación fecal que pueda adherirse al agua”. Además, se hace un muestreo en alimentos, para vigilar la inocuidad de estos.
Gobern indicó que el saneamiento ambiental, la deposición de excretas, la calidad del agua y otras condiciones de salud en los municipios en donde se identificaron los casos, particularmente en Mazatenango, Suchitepéquez, son deficientes y “posiblemente” sea lo que desencadenó el aumento de enfermedades gastrointestinales —relacionadas con la presencia de campylobacter y E. coli—. Esto ocasionó un proceso infeccioso que detonó el síndrome de Guillain Barré en los pacientes afectados por este brote.
Por su parte, el ministro de Agricultura, Maynor Estrada, informó que no se encontraron anomalías en las muestras de aves que fueron enviadas al Ministerio de Salud.
Sin embargo, el ministro de Salud, Óscar Cordón, indicó que aún se maneja la teoría de que el brote de esta enfermedad neurológica proviene del contacto con el “tracto intestinal” de aves, “no solo pollos, palomas o chompipes”.
Acceso al agua
La Organización Mundial de la Salud señala que los servicios de agua y saneamiento deficientes contribuyen al aparecimiento de infecciones y enfermedades, riesgos que pueden prevenirse al suministrar el recurso de manera adecuada.
Un informe del Banco Interamericano de Desarrollo para el Programa Piloto de Agua Potable y Saneamiento en Comunidades Rurales Dispersas en Guatemala establece que hasta el 2019 la cobertura de los servicios de agua potable y saneamiento en el país estaba por debajo del promedio en Latinoamérica.
En relación con el agua potable, el servicio llega al 87.32% de la población. Únicamente el 5% de quienes habitan en áreas urbanas puede que no gocen de este beneficio, pero en las zonas rurales es el 20.6%.
Al hablar de la calidad de dicho recurso, los datos se tornan preocupantes, pues solo la mitad de la población cuenta con un servicio seguro de agua potable. En las áreas urbanas, seis de cada 10 tendrían esa posibilidad, la cual se reduce a cuatro si se trata del área rural.
La información del BID indica que el 38% de la población tiene acceso a un servicio básico de agua potable, pero cerca de un millón de personas, principalmente en zonas rurales, beben el líquido de fuentes no seguras.
Por otro lado, el Observatorio para América Latina y el Caribe de Agua y Saneamiento (Olas) refiere que casi el 52% de los hogares en el país tratan el agua potable antes de consumirla.
En cuanto al saneamiento, otra de las preocupaciones es que el 65% de los guatemaltecos tiene acceso a servicios básicos, para el 11.67% el servicio es limitado y para el 18.58% no es seguro.
En tanto, un 4.6% de personas deposita las excretas al aire libre, lo que contamina los suelos.
Solo el 4% de las aguas servidas o residuales recolectadas por los alcantarillados y sanitarios son tratadas, mientras que el resto no pasa por ese proceso y termina en quebradas, ríos y lagos, lo que contamina el 95% de los cuerpos de agua, según el BID.
El Informe de la Línea de Base de la Gran Cruzada Nacional por la Nutrición 2021-2022 evidencia que la calidad del agua a la que tiene acceso la población es deficiente. A escala nacional se tomaron 2 mil 361 muestras del líquido que las personas usan para beber y el 75% dieron positivo para coliformes —bacterias—, y de estas, 95% fueron positivas para coliformes fecales, en las cuales en el 35.3% se detectó E.coli.
“Causas de Guillain Barré hay muchas, pero del brote que estamos viendo nuestra principal hipótesis es esa —enfermedades gastrointestinales—. De 16 de 29 muestras analizadas salieron positivas a enteropatógenos y la E.coli, que está muy relacionada con transmisión por heces fecales”, dijo Gobern.
Agregó que la intención del Ministerio de Salud es hablar con los alcaldes para que mejoren esas condiciones en sus municipios.
Desde la ANAM
Ante la falta de agua potable, saneamiento y la inadecuada disposición de excretas que persiste en muchos municipios del país, condiciones que contribuyen a la proliferación de enfermedades, Sebastián Siero Asturias, alcalde de Santa Catarina Pinula y presidente de la Asociación Nacional de Municipalidades, refirió que la Ley de Consejos de Desarrollo Urbano y Rural no les permite hacer la inversión que se requiere para mejorar esos servicios, pues son proyectos que no se construyen en un año.
Señaló que los fondos de Consejo de Desarrollo principalmente se utilizan para inversiones de agua potable y de drenajes, sin embargo, como funciona actualmente la ley, les impide utilizar esos recursos fuera del período de un año, y al no usarse “se van al fondo común”. Por ello, buscan que se modifique la normativa.
“Queremos que se mantengan los fondos por cuatro años para que eso nos permita hacer esas inversiones correctas en temas de agua potable y de drenajes”, dijo el presidente de la ANAM.
Los cambios también alcanzarían a Ley de compras y contrataciones del Estado para que los procesos de inversión sean rápidos y ágiles, para “optimizar” los tiempos de implementación de los proyectos.
Por otro lado, Asturias mencionó que desde que el Ministerio de Salud estableció la alerta epidemiológica por el aumento de casos de enfermedad neurológica en Suchitepéquez la ANAM ha estado en constante comunicación con los municipios afectados para apoyarlos durante esta emergencia.
Asimismo, el pasado lunes enviaron un oficio a la cartera por medio del cual la ANAM se pone a disposición para coordinar las acciones que sea necesaria para ayudar a contener la enfermedad.
“Sin agua no hay salud”
El ministro de Salud, Oscar Cordón, refirió ante la comisión de Salud del Congreso de la República el 7 de febrero, que si en un hogar no hay agua no habrá salud, y agregó que más del 80% de las fuentes de agua del país están contaminadas con coliformes (bacteria fecal), lo que puede enfermar a quien la consuma.
Desafortunadamente en el país se cuenta únicamente con 120 inspectores de saneamiento ambiental para inspeccionar más de 20 mil fuentes de agua, pero estos también tienen que supervisar más de 14 mil establecimientos de alimentos formales, más los informales. Por lo que, el ministro hizo énfasis en aumentar la invertir en control y la vigilancia en estos temas.
Por otro lado, hizo un llamado a la población para tomar medidas de prevención como hervir el agua que se consume, lavarse las manos con jabón, cocinar bien los alimentos. Esto previene de cualquier infección por bacterias como la campylobacter, que se ha identificado en los casos del síndrome de Guillain-Barré detectados en el país.
Mientras que el médico Gerardo Alfaro, de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), señaló que para tener fuentes de agua segura, parte de la solución es que cada Municipalidad dentro de sus planes de desarrollo ponga el tema de la salud como eje transversal, y que canalicen recursos para garantizar acueductos comunitarios con agua tratada.
