Este trabajo consiste en hacer recorridos por todos los lugares del departamento y hacer una georreferenciación —localización geográfica— de cada inmueble en mapas digitales, que serán usados para cuando tenga lugar la recolección de datos.
Este trabajo dura entre cuatro y seis meses, aunque depende del tamaño del departamento. La actualización ya se hizo en Chiquimula, Jalapa, Jutiapa, El Progreso, Izabal, Zacapa y Santa Rosa.
Largo proceso
Ekaterina Parrilla, directora nacional del Censo, explicó que el proceso para hacer un trabajo de esta naturaleza toma tres años en cualquier país.
En Guatemala todo el trabajo precensal comenzó en el 2016, continúa este año y finalizará en el 2018.
Aunque se había especulado que la recolección de datos se haría en el segundo semestre del 2017, Parrilla explicó que por recomendaciones técnicas es preferible hacer la recopilación en un mes que no sea de época lluviosa ni de cosecha. Agregó que el mejor momento será en abril del próximo año.
Parrilla precisó que por ahora se organizan mesas temáticas con diferentes instituciones del Estado, con el objetivo de homologar los temas censales.
Esas mesas finalizarán este mes y de estas se obtendrá el material necesario para elaborar la boleta de preguntas que, también por estándares internacionales, deberían ser entre 45 o 50.
Al tener el cuestionario, el INE debe levantar un censo piloto en “tres o cuatro municipios que replicará de forma exacta las características del censo, ya que eso permitirá hacer ajustes de logística”.
En este censo habrá ajustes que permitan un resultado correcto; por ejemplo, se buscará que los entrevistadores tengan pertinencia cultural.
“Se priorizará el hecho de que los encuestadores sean personas de las comunidades y que hablen el idioma local”, explicó Parrilla
El lanzamiento oficial del censo será el próximo jueves y el acuerdo gubernativo que oficializa su lanzamiento fue publicado el lunes en el Diario de Centro América.
Discapacidad y tecnología
Carlos Mancia, director de Censos y Encuestas del INE, explicó que hasta ahora se apuesta por incluir en la boleta dos temas de los cuales el país no tiene datos.
El primero sería una pregunta para obtener datos reales en lo que se refiere a personas con algún tipo de discapacidad. Según Mancia, esto será de gran ayuda para crear políticas que ayuden a este sector de la sociedad, ya que en la actualidad se carece de información fidedigna.
El segundo buscará saber cómo usan la tecnología los guatemaltecos. Esta información serviría en un principio para compararla con datos educativos, con lo cual se crearíann proyectos que a largo plazo generen empleos en los lugares donde haya personas con destrezas tecnológicas.