El fiambre es un platillo guatemalteco que se cocina exclusivamente cada 1 de noviembre. Cada familia tiene su propia receta y hay cientos de personas que aprovechan la ocasión para venderlo. Sin embargo, el golpe fuerte que ha tenido la economía familiar a raíz de la pandemia del covid-19, ha afectado esta tradición.
Muchas personas han decidido no hacer fiambre este año y otros prefieren arriesgarse, aún así han observado cómo la demanda ha bajado.
“Nos hemos enterado que hay lugares que no están haciendo el fiambre porque la bolsa no está para eso, pero nosotros nos estamos arriesgando porque aquí tampoco tenemos venta”, dijo Carmen Salguero, encargada del puesto Dola Mela, ubicado en el Mercado Central.
Salguero agregó que la venta de comida típica de la que está a cargo ha sufrido mucho durante estos meses de pandemia, por lo que esperan recuperarse con el fiambre.
En el mercado central los vendedores de verduras están a la espera de que los guatemaltecos lleguen a comprar el producto para la preparación del fiambre, sin embargo, reportan que a diferencia de años anteriores en este año han tenido una gran disminución de clientes. para esta fecha han tenido una gran disminución.
Isabel Pérez, del puesto de frutas y verduras Chabelita, indica que aún esperan que para esta última semana previo al 1 de noviembre se pueda recuperar la venta, aunque compró menos producto del que tenía acostumbrado.
“Ahorita no hemos visto ninguna de las clientelas que vemos todo el año, esperamos que esta semana la gente nos venga a buscar”, dijo Pérez.