La demanda fue alta y en varios centros de salud las dosis se agotaron en pocos días. El desafío es que quienes recibieron la primera inyección completen el esquema, que en este caso son tres dosis.
Esta vacuna protege contra el cáncer de cérvix. De acuerdo con The Global Cancer Observatory, este ocupa el tercer lugar de los cánceres que aquejan a los guatemaltecos. La incidencia de la enfermedad es del 20.3 por cada 100 mil habitantes, mientras que la mortalidad es del 11.9.
Le puede interesar
Durante el 2020 se detectaron mil 555 nuevos casos, las muertes por esta causa fueron 872. La vacunación contra el VPH pudo prevenir la enfermedad en estas mujeres, sin embargo, el ritmo para llevar el biológico a la población ha sido lento.
El esquema de vacunación vigente en el país contempla inoculación contra el VPH para niñas entre los 10 y 14 años. Son dos dosis las que deben administrárseles en un intervalo de seis a 12 meses.
Durante el 2018 se administraron 362 mil 797 dosis, cifra que casi se igualó al año siguiente cuando se suministraron 308 mil 801. Las escuelas han sido el punto principal para captar a esta población, y en mínima parte los centros de salud que también dieron el servicio.
La suspensión de clases presenciales por el riesgo de contagio del covid-19 dificultó acercar la vacuna a las niñas durante el 2020, pese a ello se colocaron 401 mil 627, según información oficial.
Pero la posibilidad de administrar el biológico en este segundo año de pandemia se complicó, el movimiento de las dosis disminuyó y se acumularon.
En agosto pasado la Defensoría de la Salud de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) dio la alerta de que 278 mil dosis contra el VPH se vencerían en abril del 2022 y había que apresurar el ritmo de vacunación para evitar que se perdieran. La opción: ampliar el rango de edad para administrarla.
Durante la tercera semana de noviembre comenzó a circular la instrucción a los centros de salud de vacunar a mujeres entre los 15 y 47 años.
“La razón era porque había vacuna a nivel del Ministerio de Salud, teníamos bastante biológico y no se estaba moviendo, porque era muy poca la población que la solicitaba”, comenta Mariela Gamarro, enfermera profesional y encargada del Centro de salud de la zona 1, uno de los puntos en donde la demanda por la vacuna fue alta.
Comenzaron a inmunizar el 22 de noviembre con dos mil dosis en existencia. Las filas de mujeres desde temprana hora esperando turno para comenzar con el esquema de vacunación contra el VPH era inusual. Para el 26 de noviembre el biológico ya se había agotado. Colocaron más de 250 dosis por día. Ahora deben gestionar el abastecimiento del biológico para administrar la segunda dosis a quienes se aplicaron la primera.
Gamarro indica que este centro de salud, por su ubicación, atiende a personas de distintas zonas, e incluso que vienen de municipios cercanos, como Villa Nueva y Amatitlán. A eso atribuye, en parte, que no alcanzara las vacunas que les asignaron. Sin embargo, no es el único lugar que se quedó sin dosis. La romería de mujeres que la buscan se ha visto en la capital.
La ginecóloga Maritza Fuentes, del Centro de Enfermedades de Transmisión Sexual ITS, indica que en dos días se agotó el biológico que tenían por la alta demanda.
Para no desperdiciarlas
El protocolo de inocular a mujeres entre los 15 y 47 años se dio por el vencimiento de las vacunas en abril del 2022, y la intención, según Fuentes, es que esas dosis no se perdieran.
El papel de la vacuna contra el VPH es preventivo, por esa razón es que se administra en niñas entre los 10 y 14 años, pensando en que no han tenido contacto con el virus. Quien ya lo tuvo, la vacuna no tendrá el efecto de generar anticuerpos como ocurre en el caso de las niñas. Sin embargo, la ginecóloga refiere que puede reducir la incidencia de lesiones cancerígenas en población adulta.
“La intención de la vacuna no es curativa, es preventiva. La están usando ahora, porque sí hay una respuesta, pero es mínima. Para no perderlas tratamos de darlas a mujeres entre 15 y 47 años”, menciona.
El Consejo Nacional de Prácticas en Inmunizaciones (Conapi), según la entrevistada, no contempla la vacunación contra el VPH para este segmento de la población. A lo que Mirna Montenegro, del Observatorio de Salud Sexual y Reproductiva (Osar), añade que no hay recomendación alguna por parte de la Organización Mundial de la Salud para vacunar a mujeres adultas.
Montenegro señala que la vacuna debe estar disponible para las menores entre 10-14 años, para las personas viviendo con VIH y víctimas de violencia sexual, así como prestadores de salud que tratan lesiones con VPH, y como grupo alterno mujeres entre los 26-47 años, pero no hay evidencia científica para inocular a este último.
A criterio de la directora del Osar, al abrir la vacunación para este último segmento de la población, el riesgo es el desabastecimiento de vacunas para esos grupos vulnerables.
A los departamentos llegó la instrucción de ampliar el rango de edad de población a vacunar contra el VPH, pero el proceso aún no ha comenzado. Las vacunas no han llegado. Por lo menos así es en San Marcos, Escuintla y Suchitepéquez, tal como señalaron trabajadores de salud de la localidad consultados sobre el tema.
Uno de ellos, que habló en anonimato, indica que la prioridad por ahora es acelerar el ritmo de la vacunación contra el covid-19, y en eso se enfocan, pues hay biológico anticovid que está por vencer y deben administrarlo cuanto antes. Luego de ello, se ocuparán de administrar las demás vacunas.
Única jornada
Las mujeres entre 15 y 47 años que se vacunaron en esta jornada única contra el VPH tienen garantizada su segunda y tercera dosis. Según Fuentes, la instrucción girada a los centros de salud es que, si las personas no llegan a su cita para recibir la vacuna, deben salir a buscarlas. Tienen que completar el esquema.
Al acabarse las dosis, quienes no lograron vacunarse en los servicios de salud pública, la única opción es acudir al servicio privado.
Para la población entre 10 a 14 años el biológico “siempre” estará disponible en los servicios públicos, pues en este grupo se busca prevenir, a futuro, el cáncer cérvico uterino y lesiones precancerosas, dice la ginecóloga.
- ¿Qué es el VPH?
El Virus del Papiloma Humano (VPH) es la infección de transmisión sexual más común, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Su nombre se deriva de las manifestaciones de la enfermedad en el cuerpo, pues provoca papilomas y afecta únicamente al ser humano.
Casi todas las personas sexualmente activas se contagian en algún momento de su vida. La mayoría no tienen manifestaciones de la enfermedad, y generalmente desconocen que están infectadas. Los síntomas pueden presentarse años después de haber contraído el virus.
Las infecciones de este virus son la principal causa de cánceres en el cuello uterino o de cérvix, el cual puede tardar de 10 a 20 años, o más, en desarrollarse después de una infección por VPH.