Comunitario
Confirman contaminación de agua en Cuyotenango, el municipio con más casos de Guillain-Barré
Pobladores se cuestionan si mala calidad del agua en Cuyotenango es la causante del brote de enfermedad neurológica, que ha impactado en la economía local.
Dos de las seis muestras de agua que el Ministerio de Salud evaluó en Cuyotenango dieron positivo a contaminación fecal y otra más a microorganismos, lo que podría apuntar a la principal razón del brote del síndrome de Guillain-Barré.
Cuyotenango es actualmente el municipio con más casos de ese padecimiento a escala nacional. Los vecinos confirman que el agua es sospechosa de muchas enfermedades que los afectan.
Las autoridades sanitarias han tomado muestras de alimentos, de los suelos y del agua de distintos municipios donde se han detectado casos de la enfermedad.
Eso coincide con lo dicho anteriormente por el ministro de Salud, Óscar Cordón, respecto de que más del 80% de las fuentes de agua del país puede enfermar.
Entretanto, los pobladores denuncian que el líquido es suministrado por la municipalidad, sin pasar por un proceso de purificación, aunque pagan por el servicio Q5 al mes.
El agua sale turbia de los grifos, con basura y, según vecinos, en ocasiones han encontrado lombrices, pequeños caracoles y peces.
Prensa Libre corroboró ese extremo, visitó una residencia de la localidad y, al abrir el grifo de la pila, el líquido cayó sucio. Se hizo la prueba tres veces y sucedió lo mismo.
Por esa razón, quienes pueden compran agua purificada y evitan utilizar el agua municipal para el consumo, únicamente para lavar ropa o el aseo personal. Quienes pueden compran garrafones de agua para beber, el resto la hierve o clora, aunque no todos lo hacen.
No solo es de mala calidad, sino que el agua no llega a todos los pobladores. En los cantones, el recurso es escaso, según vecinos. En verano, el caudal del río es menor, lo que impacta en el abastecimiento a los hogares. Lo contrario sucede en invierno, pero por las tuberías lo que circula es lodo. Hay comunidades que han pasado hasta 20 días sin el líquido, informaron.
Tal situación representa un riesgo pues, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los servicios de agua y saneamiento deficientes contribuyen al aparecimiento de infecciones y enfermedades, situación que puede prevenirse al suministrar el recurso adecuado.
Gerardo Alfaro, de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), ha señalado que, para tener fuentes de agua segura, parte de la solución es que cada comuna, en sus planes de desarrollo, ponga el tema de la salud como eje transversal, y que canalice recursos para garantizar acueductos comunitarios con agua tratada.
De acuerdo con Salud, se ha dado asistencia técnica a las municipalidades para garantizar la cloración del agua como lo dicta el artículo 68 del Código Municipal, y como lo dispone el Código de Salud en el artículo 79, el dice que las comunas están “obligadas” a abastecer de agua potable a las comunidades dentro de su jurisdicción. De no cumplir con lo establecido hay sanciones que van desde el apercibimiento escrito hasta multas económicas.
Impacto económico
Las noches en el parque de Cuyotenango, Suchitepéquez, solían ser concurridas; sin embargo, desde hace semanas, se observa menos gente en el lugar y sus alrededores. En los puestos de comida, las ventas han disminuido, aunque cuentan con permisos sanitarios para funcionar y siguen las normas de higiene establecidas por el Ministerio de Salud.
Este es el municipio con más casos del síndrome de Guillain-Barré en el país. Se contabilizan 15 pacientes locales de un brote que comenzó en Guatemala el pasado 24 de noviembre, sin que a la fecha se tenga certeza de qué lo originó.
Si bien este es un padecimiento que no se contagia de persona a persona, hay preocupación y temor entre la población de enfermar, principalmente cuando se sabe que cinco personas han fallecido, una de ellas en ese municipio.
“No sabemos realmente por qué se da esta enfermedad, pero el problema es que hay mucha desinformación”, indica Loyda López, quien tiene más de 45 años de vender tostadas en el parque, y en las últimas semanas reporta pérdidas pese a que prepara menos productos. “Ni en la pandemia del covid-19 se vio esto”, agrega.
No es la única. Los vendedores de churros, refrescos, licuados y papas fritas que se ubican todas las noches en los alrededores del parque también han visto mermada la demanda de sus productos. Lo mismo sucede en los mercados, principalmente en las ventas de pollo.
El presbítero Jesús Hidalgo, de la Parroquia Santo Cristo de Esquipulas, Cuyotenango, refiere que el brote de la enfermedad neurológica ha impactado a la población de distintas maneras. Mientras unos muestran preocupación, a otros no les interesa.
“Se habla de —síndrome de— Guillain-Barré, pero el Ministerio de Salud no ha dicho qué lo causa”, manifiesta.
Servicio municipal
Para suministrar agua a Cuyotenango, la comuna recoge el líquido de un río y la envía a cuatro tanques de captación municipal para procesamiento. En dos de esos depósitos se retira cualquier basura gruesa, los otros dos son para filtrarla, y para ello se usan capas gruesas de arena colocadas en el fondo para dejar pasar el líquido limpio.
De allí, el agua pasa al proceso de cloración, para caer a pozos donde se almacena antes de ser distribuida a través de tuberías a más de ocho mil hogares en el casco urbano. Las otras comunidades las abastecen con tanques y pozos solares y eléctricos.
De acuerdo con José María Maldonado, encargado del área de servicios de la comuna de Cuyotenango, el Ministerio de Salud ha recolectado varias muestras del agua de los tanques de captación municipal para analizarla en el Laboratorio Nacional de Salud y establecer si el recurso tiene relación con el brote de la enfermedad neurológica, y están a la espera del resultado.
Manuel de Jesús Castañeda, concejal primero, comenta que no poseen agua cien por ciento potable, pero pueden garantizar al pueblo que el recurso es tratado conforme los lineamientos de clorificación de Salud. Sin embargo, recomienda a la población hervirla, para tener una total garantía de no padecer problemas gastrointestinales.