Con reformas a la Ley de la PNC se busca detener migración de agentes
Director de la PNC habla sobre cómo termina su primer año al mando de la institución , los cambios que prevén y las dificultadas que aún enfrentan.
David Custodio Boteo, director general de la PNC.(Foto Prensa Libre: José Patzán)
Unos meses después de haber asumido el mando de la Policía Nacional Civil (PNC) y luego de la aprobación de las reformas a la ley de esa institución, su director general, David Custodio Boteo, habló en entrevista con Prensa Libre sobre las dificultades que aún enfrenta el cuerpo de orden público y los proyectos previstos para recuperar la credibilidad de los agentes.
Custodio explicó que las reformas aprobadas tienen como objetivo endurecer los castigos para los agentes que no cumplan con su trabajo, pero también mejorar las condiciones laborales del personal, y de esta manera prevenir su migración hacia otras instituciones o incluso hacia Estados Unidos.
¿Qué puede destacar de las reformas a la Ley de la PNC aprobadas?
Es un logro importante. Habíamos luchado contra viento y marea por el tema de la dignificación, la movilidad y la tecnología, porque son muy importantes para accionar contra el crimen organizado y delincuentes.
En muchos años no había habido nivelación de salarios, y muchos agentes vienen de departamentos lejanos; ellos pagan altos costos en pasaje y alimentación. Ahora tendrán un bono que está en la nómina y no quedará a discreción de un ministro decidir si se los otorgan.
Además, tendrán un escalafón, que tiene un límite de Q2 mil cuando cumplen 20 años de servicio; eso estabilizará la institución, para que los agentes no renuncien o migren.
¿A dónde migran los PNC?
Los policías que son muy buenos han migrado al Ministerio Público (MP) o al Organismo Judicial (OJ), y estas instituciones se benefician porque el policía ya tuvo una instrucción, ya sabe sobre el uso de la fuerza, cómo manejar un arma de fuego. Es poca la capacitación que reciben para poder ingresar como agentes de seguridad y con mejor salario.
¿Cuáles son las consecuencias de esas renuncias o migraciones?
En cierto momento se debilita la fuerza policial. En el 2023 se tenían 42 mil policías y en la actualidad tenemos 41 mil 700, pero es porque también abandonaron el empleo para buscar un mejor futuro en Estados Unidos.
¿Qué acciones se implementan ante la falta de agentes?
En este período de cuatro años se contempla tener otros 12 mil agentes. Este año se ha notado el trabajo de la PNC, porque ha tenido mejor y más rápida reacción en muchos de los casos. La actitud del policía ha mejorado, pero también se le debe prestar mucha atención al Sistema Penitenciario (SP).
¿La seguridad depende del control de las cárceles?
Hay un hacinamiento del 340 % en todas las cárceles. Por ese descontrol y sobrepoblación, los reos se profesionalizan más para cometer hechos delictivos con pandilleros y líderes de estructuras criminales de alta jerarquía. A medida que se tenga el control del sistema penitenciario, la población guatemalteca va ser la primera en sentir ese cambio. La PNC tendrá, por ende, mayor control en las calles.
¿En cuánto tiempo se puede lograr ese control?
Ya se colocó la primera piedra. Con la cárcel Renovación 1 se dio el primer paso, y se aisló a 130 reos de alta peligrosidad en delitos de extorsión. Falta apartar a los cabecillas de las maras Salvatrucha y 18. Creo que, con eso, se tendría un control total del SP.
Dicen que descendió el número de hechos criminales. ¿Cómo se demuestra?
Con cifras. Hoy en día tenemos 64 homicidios menos en comparación con el 2023; casi todos los delitos han bajado. Este año se han desarticulado 53 estructuras criminales. Se han efectuado 735 allanamientos, y en estos se ha capturado a 395 personas. A inicios de año, había mucho asalto y delitos contra el patrimonio, pero hubo capturas con amplio récord delictivo.
¿Qué otros cambios se determinaron?
Queremos hacer un cambio total en el pensamiento del agente en temas de ideología, ética y pueblos indígenas. Queremos que la nueva PNC sea respetuosa de la población en general, sin ningún tipo de distinción.
Queremos incorporar a policías de todos los departamentos para que, al salir de la Academia, se integren a sus comunidades, como soporte principal en Policía comunitaria.
¿En qué fase se encuentra la elección de los nuevos aspirantes?
No ha culminado. Se hizo un cambio total del personal que perfila a los nuevos agentes y se nombró a un nuevo subdirector de la Academia de la PNC. Además de las pruebas físicas, médicas, académicas y psicológicas, se hacen pruebas de polígrafo. Una de las principales preguntas es si alguien les ofreció o si pagó para entrar en la Academia. Lo que queremos es desarticular estos grupos, si es que están en la PNC o son estafadores. Se han hecho capturas, pero no necesariamente son policías; tal vez tienen nexos con policías, pero se aprovechan de esto en sus comunidades, y aducen tener contacto con un mando en la Academia.
¿Cómo se garantizará que las reformas mejoren las condiciones de la PNC?
El reglamento disciplinario será más drástico; ya no serán aquellos procesos en que la investigación por delitos graves se desarrolle durante años y, por consiguiente, el agente no será separado de su cargo. Se quiere que sean procesos cortos.
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