La última propuesta de un estado de Calamidad salió del presidente Alejandro Giammattei el 14 de agosto, la medida más severa que el presidente proponía era un toque de queda que iniciaba a las 10 de la noche y terminaba a las cuatro de la mañana del día siguiente.
Pero el número de accidentes de tránsito empieza a aumentar a las cinco de la tarde de cada día y su pico más alto se registra entre las siete y nueve de la noche. Por eso el toque de queda no tuvo mayor incidencia en los accidentes de tránsito, hechos de violencia y contagios de covid.
Ahora, un grupo de epidemiólogos ha compartido una nueva propuesta que esperan sea bien recibida por el Ejecutivo y aprobada por los diputados. Se trata de un toque de queda que inicie a las 7 de la noche para que desfogue las emergencia de los hospitales que actualmente se encuentran sobrepasados en la atención de pacientes covid-19.
“La propuesta salió a raíz de unos análisis que hicimos de la respuesta a las medidas que se decretaron el año pasado. Si la disminución de contagios coincide con una disminución de víctimas de accidentes de tránsito y de hechos violentos, ayuda a que las emergencias ya no estén abarrotadas”, explica el doctor Jorge Luis Ranero, presidente del Colegio de Médicos y Cirujanos de Guatemala.
El Observatorio Nacional de Seguridad del Tránsito (Onset), registra un aumento de casi tres veces más los accidentes de tránsito ocurridos en 2021 en comparación con el año anterior.
En 2020 se reportaron 2 mil 345 accidentes de tránsito, con 744 fallecidos y 3 mil 580 lesionados. Mientras que en 2021 se registraron 4 mil 601 accidentes, con 1 mil 228 fallecidos y 4 mil 784.
Los meses de abril, mayo y junio son los que más aumento de casos muestran en comparación con el 2020.
Los directores de los hospitales reconocen que son los accidentes de tránsito los que desbordan las emergencias. El doctor Marco Antonio Barrientos, director del Hospital Roosevelt, advirtió que las compras por excepción (medida que busca el Ejecutivo para abastecer hospitales) no sería la solución al problema ya que el mercado está desabastecido por la demanda mundial.
“No solo estamos viviendo covid, seguimos viendo que siguen las fiestas, las parrandas y eso nos está haciendo estragos. Solo el Hospital Roosevelt tuvo 2 mil 400 ingresos por politraumatismos el mes pasado y ellos no están un día con nosotros, ellos pueden estar semanas en el hospital” dijo Barrientos al decir que necesitan “restricciones serias”.
Los sedantes que se usan para los personas que llegan a las emergencias de los hospitales son los mismos que se utilizan para los pacientes de covid-19 que necesitan ventilación. La diferencia es que un paciente covid tiene cinco veces más el requerimiento de estos medicamentos, es por ello que escasean, explicó Ranero
“En emergencias en 2021 hemos visto 60 mil 518 pacientes y muchos son por cirugía, traumatología y accidentes. Si podemos controlar a la población para que no salga y se quede en sus casas en las noches sino tiene que trabajar, eso no sí nos ayudaría a aplanar la curva” respondió el doctor Gerardo Hernández, director del Hospital General San Juan de Dios en una citación con la Comisión de Previsión Social del Congreso donde se evaluaba la situación actual de los hospitales.
Los directores de los hospitales agregaron que la restricción de la movilidad debería iniciar los sábados y domingos a las dos de la tarde para evitar que la gente salga a fiestas ya que son puntos de contagio y aumentan las posibilidades de accidentes de tránsito para quienes asisten y terminan en estado de ebriedad.