Según la publicación, “algunos servicios ya están colapsados y el cierre de los servicios de atención de emergencia y consultas externas es inminente en pocos días”.
La consecuencia de este problema, según los médicos, es la pérdida de vidas y enfermos que no puedan ser rehabilitados, por lo que aseguran que en esto no es responsabilidad del personal de salud.
En la publicación se asegura que las unidades ejecutoras de la cartera ya no pueden adquirir más deuda pues todavía se debe pagar a los proveedores; además, se indica que se abstienen porque hay varias denuncias que la Contraloría ha interpuesto en el Ministerio Público (MP), porque se han adquirido compromisos sin tener presupuesto.
Los médicos piden al presidente, Jimmy Morales y a las autoridades del Congreso, a los dirigentes políticos, al MP y a la Contraloría, que intervengan para garantizar la atención a la población.
Garantiza atención
El vocero del Ministerio de Salud, Edgar Arana, aseguró a Prensa Libre que hace dos semanas se aprobó una ampliación presupuestaria de Q400 millones para abastecer las unidades y red hospitalaria, con lo que se garantiza el servicio, aunque el desembolso del dinero depende de la cartera de Finanzas.
Arana dijo que ya se solicitó otros Q800 millones que servirían para terminar el año con insumos y que para equipo e infraestructura se necesitan otros Q1 mil 200 millones.
Según el vocero, no es un secreto que el presupuesto asignado por el Congreso para este año es insuficiente y dijo que es necesario que se trabaje sobre los criterios de la Contraloría en cuanto a la compra de medicamentos.
US$500 mil para asistencia
La Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa) entregó un aporte de US$500 mil para que los ministerios de Finanzas y Salud contraten a un equipo que asesorará técnicamente el área administrativa y de inventario en los grandes hospitales.
Se trata de un equipo de 12 personas que trabajarán durante 10 meses con el Ministerio de Salud Pública.
“El apoyo, que va directo a los procesos técnicos y asistencia técnica, es para buscar las mejores prácticas, que en una empresa son bastante normales de encontrar pero en el ambiente público es mucho más difícil. Claro, los problemas son mayores por el tema de la calidad del gasto”, expuso Felipe Bosch, presidente de Fundesa.
Asimismo, el Gobierno pasa penas porque el principal proveedor de oxígeno a los hospitales del país, Productos del Aire, podría dejar de abastecerlos en julio, debido a una deuda que asciende a Q26 millones.
“Este problema es tremendamente complicado”, dijo Cabrera.