Sin embargo, casi la mitad de ellas se trabajarán como obra de arrastre debido a la baja ejecución del presupuesto 2020.
El viceministro Javier Maldonado explicó al salir de una reunión con la diputada Lucrecia Marroquín de Palomo, que el año pasado apenas lograron ejecutar el 30 por ciento de un presupuesto de Q340 millones
Pero a decir de Maldonado, aun así lograron iniciar con los trabajos de 128 escuelas a nivel nacional, aunque no especificó en qué lugares están. Esto será pagado como obra de arrastre para este año y se convertirán en proyectos multianuales, unidos a las 150 escuelas que dice tienen planificadas mejorar.
“Tenemos que ser honestos, la ejecución presupuestaria no fue tan buena, sin embargo, hay 128 escuelas que se están trabajando, lo que se hizo fue no pagarlas”, agregó.
En total, este viceministerio que fue creado en septiembre de 2020 se enfocará en el remozamiento de 250 centros educativos.
Aunque la diputada Marroquín se congratuló al ver que esta entidad inició con los trabajos, el número sigue siendo bajo para el total de establecimientos que necesitan ser mejorados.
Según un diagnóstico hecho por el Ministerio de Educación antes que las tormentas Eta e Iota afectaran el territorio nacional, son 10 mil edificios escolares los que tienen atención prioritaria para el mejoramiento de sus tuberías, servicios sanitarios y servicios de agua potable.
Solo en Alta Verapaz hay 1 mil 633 establecimientos que necesitan atención, a este le sigue Petén como el departamento que más centros educativos tiene con necesidades, con un total de 851.
En noviembre, luego del paso de la tormenta Eta, el Mineduc reportó 380 escuelas con daños severos y luego de la tormenta Iota, semanas más tarde, alrededor de 100 centros educativos quedaron inhabitables.
Maldonado agregó que bajo su cargo tienen a 70 escuelas ubicadas en el norte del país que necesitan mejoramiento tras los desastres naturales del año pasado y, aseguró, que para este año estarán todas remozadas.
Demolición de edificios
Hay escuelas que su deterioro es tan grave que el CIV ha decidido demolerlas y construirlas de nuevo. Tal es el caso del edificio donde funciona por la mañana la Escuela Oficial Urbana de Varones No. 22 República de México y por la tarde la Escuela Oficial Urbana Mixta No.46 Miguel de Cervantes Saavedra.
Por fuera este establecimiento pareciera estar en óptimas condiciones, sin embargo, al entrar a sus instalaciones se puede observar que en el techo de cada una de sus siete aulas hay una grave humedad.
Incluso, en la cocina de la escuela se pudo observar filtraciones de agua que vienen desde el piso.
“Sé que esta escuela tiene su historia, pero cuando me dijeron que lo iban a demoler me puse feliz. Imagínese en qué momento le cae el muro a los niños”, dijo María del Carmen Castellanos, directora de la escuela Miguel de Cervantes al mostrar una de las paredes del patio principal que está a punto de desplomarse.
A decir de Castellanos, anteriormente han tenido incidentes por el estado en el que se encuentran sus instalaciones. Menciona que en una ocasión le cayó un pedazo de techo a un niño y antes de la pandemia tenían que poner un cordón de seguridad en el muro del patio para que los estudiantes no se acercaran tanto.
Desde el 13 de marzo de 2020, la escuela no está siendo visitada por los casi 350 niños que estudian ahí en las jornadas matutina y vespertina, por lo que Castellanos menciona que es el momento ideal para demolerla y construir una nueva.
Aunque esto está en planificación aún, dice que es optimista con las noticias que las autoridades del CIV le dieron “hasta ya vi a qué escuela nos podemos ir e n caso reanudemos clases presenciales”, agregó.