Para llevar a cabo este proyecto, el equipo de Guatemaltecos por la Nutrición elaboró un plan de trabajo que se divide en cinco “ejes”. El objetivo principal es “transformar las causas de la desnutrición para garantizar una solución sostenible para este fenómeno que afecta a uno de cada dos menores en Guatemala“, dice el comunicado de prensa.
El proyecto será destinado, en su primera fase, a tres mil familias ubicadas en La Democracia, La Libertad y Cuilco, en Huehuetenango, y se destinarán Q116 millones.
Atención primaria de la Salud
Uno de los ejes será la Atención primaria de la Salud, en donde las acciones serán enfocadas exclusivamente a los individuos de las comunidades.
La intervención individual hace énfasis en mujeres embarazadas y niños menores de cinco años, para el cual el Campamento de Nutrimóviles les prestará atención médica y nutricional.
“Empezamos por lo urgente, que es la intervención médica, donde hay casos de desnutrición que necesitan intervención inmediata. Por eso tenemos esta estructuras de campamentos de primer mundo, hechas en España, donde tienen mucha experiencia en la parte de campamentos móviles y toda la movilidad médica satélite que tenemos”, explica Estuardo Sinibaldi, director de Corporación Castillo Hermanos.
Agua y saneamiento ambiental
Este eje de trabajo del proyecto busca cambiar en las comunidades los determinantes ambientales que afectan la nutrición y salud de las familias.
La intervención familiar busca asegurar las condiciones de habitabilidad en los hogares de los beneficiarios, en condiciones como agua potable, preparación adecuada de los alimentos, cocinas libre de humo, la promoción de higiene personal y familiar, y el manejo adecuado de las aguas residuales.
“Tenemos lo que realmente va a cambiarle la cara a la desnutrición y son comportamientos que llevan un proceso de educación en el que necesitamos tener agua limpia en la casa, hogares libres de humo”, indica Sinibaldi
Fortalecimiento de la economía familiar
Este eje se enfoca en desarrollar los determinantes económicos que pueden favorecer a las comunidades beneficiadas por el proyecto.
Para llevar a cabo esto, el proyecto busca incentivar una mayor productividad en las comunidades mediante promotores educadores, invernaderos semi hidropónicos y grupos de ahorro.
Mynor Pérez, técnico en desarrollo empresarial del proyecto Guatemaltecos por la Nutrición, detalla el método de los grupos de ahorro, y cómo las mujeres de las comunidades juegan un papel importante en el desarrollo del proyecto.
“Queremos hacer grupos de auto ahorro y crédito en las comunidades para motivar e incentivar esta cultura y luego trascender sistemáticamente en temas de empleabilidad y de empresarialidad en la mujer. El sistema de ahorro es haciéndolo semanal, quincenal y mensualmente con los grupos de mujeres. Esperamos en 12 meses tener un ahorro significativo para el grupo y, en ese lapso, daremos microcréditos a las mujeres del grupo con bajos intereses”, indica Pérez.
Soporte nutricional
Augusto López, promotor nutricional, explica cómo será la metodología de este eje, que busca desarrollar habilidades y herramientas a las madres de familia para poder elaborar platillos nutritivos.
“Trabajamos directamente con madres de familia y realizamos talleres con los alimentos a los que tienen acceso a partir de la producción. Trabajamos en un menú nutricional para que las familias tengan una alimentación variada“, indica López.
También detalla la organización de esta aspecto, en donde trabajarán con grupos de 15 a 18 personas.
“Llegamos y proporcionamos los ingredientes de cada receta con el objetivo de que los puedan replicar en casa para tener una buena alimentación nutricional y aprovechar los beneficios de cada uno de los alimentos”, recalca el promotor.
Acceso a alimentos
Este último eje tiene por objetivo que las personas de las comunidades aprendan respecto al cultivo de alimentos saludables que puedan emplear en su alimentación diaria.
“Además de enseñar el balance alimenticio, también enseñamos a cultivar ciertos alimentos que son parte de una dieta, pero que probablemente no están siendo consumidos de manera balanceada”, indica Sinibaldi.