“La cacería ilegal es un problema constante en el país” , subrayó el director de Vida Silvestre del Conap, Alan Marroquín, en la conferencia de prensa celebrada esta mañana en la capital del país.
Guatemala es uno de los 19 países megadiversos del mundo, los cuales aportan el 70 por ciento de la totalidad de la biodiversidad del planeta, y en sus bosques y mares habitan algunos ejemplares únicos en el mundo.
Animales como el emblemático quetzal, el tiburón martillo o el jaguar negro habitan el territorio guatemalteco y sufren las consecuencias de la deforestación y el tráfico ilegal.
“Por cada animal que se compra se matan diez más” , alertó Marroquín.
El pasado año, el Conap logró rescatar 1.628 animales, pero las capturas ilegales siguen siendo habituales en muchas zonas rurales del país: “es un problema real” que “influye” en la conservación de muchas especies, apuntó.
“El país de la eterna primavera está a punto de desaparecer” , aseguró Marco Vinicio Cerezo, de la fundación ecologista Fundaeco, que también participa en el proyecto.
Caza masiva
Cerezo advirtió de que la caza masiva de animales provoca que los bosques se conviertan en espacios “vacíos” que “poco a poco se van a ir degenerando” , por lo que es necesario concienciar a la sociedad para detener esta tragedia ecológica y aprovechar el potencial medioambiental de Guatemala, siguiendo el ejemplo de países como Costa Rica.
“Guatemala necesita una pausa ecológica” , aseveró.
Por su parte, uno de los portavoces del Club de Caza, Tiro y Pesca, José Luis Guzmán, apeló a la conciencia de los cazadores registrados para respetar el calendario cinegético y practicar una “caza responsable”.
