También han sido perjudicados los vecinos de las colonias Amparo, Bethania y Granizo, que en la zona 7 abordan las unidades que van a la zona 4.
Los problemas se deben a la poca circulación de buses, ante el temor de algunos pilotos que decidieron no trabajar este día, por miedo a ser atacados por supuestos extorsionistas.
Las personas han tenido que abordar transporte alternativo, como taxis, picops, motos y microbuses y buses particulares.
Transporte alternativo por escasez de unidades por ataques armados. pic.twitter.com/zxafflmSpi
— Glenda Sánchez (@gsanchez_pl) 2 de febrero de 2017
Los usuarios han comentado que la inseguridad no afecta solo la movilidad, sino también el “bolsillo”, pues deben gastar más por recorrer distancias cortas.
En un sondeo se determinó que los taxis llegan a cobrar Q10 por persona y trasladan hasta cinco, mientras que los buses y microbuses Q5 por cada uno.
Pasajeros corren para poder abordar el transporte alternativo, en entrada de Bethania, zona 7. pic.twitter.com/2zfFEfr02D
— Glenda Sánchez (@GlendaVivianaS) February 2, 2017
Los ataques
El miércoles último el piloto de un bus de la ruta 204 murió baleado en la colonia La Reformita, mientras esperaba su turno para retornar a la zona 6.
Fue identificado como Jairo Antonio Gramajo, a quien le disparo un hombre que abordó la unidad y luego escapó en una motocicleta que tenía cerca del lugar.
Otro hecho de violencia fue contra un piloto de la ruta 36 en la calzada San Juan. El conductor se salvó de morir al ver a los atacantes y lanzarse al suelo de inmediato.
La unidad quedó con varias perforaciones de bala, pero nadie resultó herido.
Varios casos más dejaron cuatro pasajeros heridos en incidentes armados en el transporte público.