Según se informó, los hospitales de campaña son unidades médicas móviles que pueden instalarse y operar en áreas donde los servicios de salud se encuentran lejanos o escasos, lo que permitirá atención a pacientes con los servicios médicos necesarios.
Los hospitales serán instalados en departamentos que están distantes de los centros asistenciales temporales habilitados por el gobierno para luchar contra el coronavirus, como Huehuetenango y Alta Verapaz.
Cada hospital de campaña tiene un valor aproximado de US$275 mil (unos Q2 millones 138 mil 710.75) y capacidad de albergar 40 camas.
En su interior existe conexión de servicios de agua y energía eléctrica, cuentan con aire acondicionado o calefacción, dependiendo al área donde se utilice, y están equipados con generadores eléctricos que le permiten autonomía en su funcionamiento.
El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social se encargará del equipamiento adicional para que estos centros hospitalarios sean operativos y el Ejército de Guatemala, a través del Batallón Humanitario y de Rescate, será el encargado del ensamblaje de los mismos para iniciar a atender a la población necesitada.