Uno de los aspectos que más le llama la atención a las autoridades de Salud es la organización de bazares navideños, eventos que por tradición se llevan a cabo a partir del 1 de diciembre, por lo que ya se coordina con la comuna capitalina para que se implementen protocoles de seguridad que garanticen que no serán focos de contagio, pues cada año miles de personas los visitan.
Amelia Flores, ministra de Salud, señaló este jueves 26 de noviembre que los bazares navideños deben cumplir con medidas de prevención, tanto para compradores como para comerciantes.
Agregó que “por fortuna” esos eventos se desarrollan en espacios abiertos, lo que disminuye las posibilidades de contagio; sin embargo, los organizadores están obligados a garantizar el uso adecuado de mascarilla, tener dispensadores de agua para el lavado de manos, dispensadores de alcohol en gel y tener un aforo acorde al especio donde se desarrollen.
Además, debe haber control estricto en el manejo de los alimentos que se distribuyen en los bazares y otros eventos de temporada.
Flores dijo que están a la espera de que la comuna capitalina entregue los protocoles de prevención para esos eventos, los cuales deben ser evaluados por expertos de la cartera, quienes determinarán si se autorizan o no.
“Estamos esperando la solicitud de autorización de los protocolos y también trabajamos con los protocolos para las ferias -patronales- que en muchos municipios están esperando”, agregó la ministra.
En el caso de la capital, la comuna tiene planificados cuatro bazares navideños: Plaza Barrios y 19 calle, Octava calle, Plaza Sagrario (sobre el Mercado Central), y sexta calle, todos en la zona 1.
De acuerdo con la comuna capitalina, para esos eventos y el resto de actividades relacionadas con la temporada navideña se lleva control de los inquilinos y se toma la temperatura de las personas que asisten.
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Eventos religiosos
Flores añadió que vigilan el desarrollo de eventos religiosos de gran magnitud, en referencia a la celebración de la Virgen de Concepción -el 8 de diciembre- y el día de la Virgen de Guadalupe -el 12 de diciembre-, pues cada año decenas feligreses acuden a sus respectivos templos.
Agregó que confían en que los guatemaltecos que asisten a las iglesias continúen manejando la situación como lo han hecho desde que se autorizaron los eventos religiosos, pues muchos de ellos respetan el aforo establecido para cada templo.
“Sabemos que son fiestas importantes y tradiciones que no queremos dejar de cumplir, pero confiamos mucho en la población de que celebre de forma responsable”, dijo Flores.
La funcionara reconoce que una parte de la población se ha relajado ante la pandemia, “pero la mayoría es responsable”.
“Coordinaremos con las iglesias para que las actividades se desarrollen de forma ordenara. Lo que menos queremos es arriesgarnos en aglomeraciones porque la pandemia sigue y se debe continuar manejando el aforo, el uso de la mascarilla y el lavado de manos”, agregó.