Según la cartera de Educación, como medida de prevención cada dirección departamental podrá aplicar el protocolo que se utilizó durante la pandemia del Covid-19 según el estado de alerta que tenga el municipio afectado, pero de ser necesario, se trabajará un nuevo manual para las escuelas.
El protocolo que está publicado en la página oficial de la cartera de educación establece algunas medidas como elaborar materiales de prevención de la enfermedad en los idiomas español y mayas. Además, los establecimientos deben contar con instalaciones que contengan las condiciones necesarias de saneamiento e higiene. Estas medidas incluyen la limpieza constante del lugar y la aplicación de gel antibacterial a los alumnos.
El Departamento de Comunicación de la cartera también explicó que aún no existe una claridad sobre cuáles son los vectores de contagio del nuevo padecimiento, por lo que aún no se ha considerado la posibilidad de suspender actividades educativas en el sector privado, que es el único que ha comenzado el ciclo escolar. En el caso del área pública se tiene previsto que las clases inicien el 19 de febrero.
EN ESTE MOMENTO
Mientras tanto, la cartera de Salud descarta que el contagio de la enfermedad se transmita de persona a persona, además, de los casos que se tiene sospecha al menos tres se registran en menores de edad.
Síntomas
Sobre los síntomas de la enfermedad neurológica aguda, autoridades de Salud señalaron la importancia de buscar atención médica inmediata ante cualquier síntoma de debilidad muscular.
“Una debilidad en sus piernas u otra afectación que le imposibilite caminar debe de consultar inmediatamente, no debe esperar varios días ya que la debilidad, la pérdida de tensión muscular empieza a progresar. Puede empezar con pantorrillas, luego sube a muslos y hasta puede llegar a músculos respiratorios que pueden comprometer la vida”, se dijo.
El síndrome se caracteriza por una respuesta autoinmune del cuerpo a algún agente que haya ingresado al organismo por agua o alimentos contaminados.
En resumen, los síntomas pueden ser:
Debilidad muscular y dolor: dificultad en la capacidad de moverse con normalidad que puede ser un signo de problemas neurológicos. Los casos detectados han presentado dolor o debilidad en una o ambas piernas, y es un malestar que asciende a los brazos.
Flacidez y reflejos osteotendinosos (cuando se golpea ligeramente un tendón) disminuidos o ausentes en extremidades: las piernas o los brazos están más flojos de lo normal y los reflejos que se producen al golpear ciertas partes del cuerpo, como la rodilla o el codo, están menos activos o incluso no responden.
Enfermedades por infecciones estomacales: la hipótesis de la existencia de algún contaminante presente en agua o alimentos ha llevado a la necesidad de tomar medidas dirigidas hacia las enfermedades infecciosas estomacales. Estas enfermedades podrían estar vinculadas a la bacteria E.coli o Campylobacter jejuni y serían desencadenantes a la reacción inmunitaria del cuerpo.
El tratamiento que actualmente se ha administrado a los pacientes ha sido hospitalarios inicialmente y se centra en la regulación del sistema inmunológico para detener el progreso de la enfermedad. Posteriormente, cuando hay una mejoría, el tratamiento es domiciliario y se sigue la rehabilitación con fisioterapia para recuperar la fuerza muscular.