Pero además, el estado de calamidad le da la potestad al Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) para dictar las medidas de restricción necesarias que incluye evitar las concentraciones públicas y cualquier clase de reuniones y eventos.
Sin embargo, el decreto gubernativo 6-2021 no contiene ninguna prohibición expresa relacionada a los eventos religiosos.
Aún así, representantes de las iglesias católica y evangélicas dijeron que serán más estrictos en el cumplimiento del aforo en las misas y servicios religiosos
El Arzobispo Metropolitano, Gonzálo de Villa, expresó que las iglesias no cerrarán y seguirán celebrando misas, aunque hizo un llamado para que cada parroquia respete el número de personas que pueden ingresar y se mantenga el distanciamiento social.
“Tenemos que reiterar que nos debemos cuidar y hacer lo posible para que se vacune toda la población que queda. El modo que se ha organizado la vacunación tiene sus limitaciones pero también hay mucha gente que no ha querido vacunarse por dejadez o porque creen que no es buena y deben saber que la vacunación es lo mejor que se puede hacer en este momento”, dijo De Villa.
El presidente de la Alianza Evangélica, Juan Medina Bermejo, también dijo que las iglesias se mantendrán abiertas, aunque agregó que desde hace año y medio hay muchos centros que no han retomado sus actividades.
“En la iglesia cristiana evangélica hemos respetado los aforos, hay muchas organizaciones que ni siquiera están teniendo reuniones todavía, pero el llamado está a que sigamos apretando aún más el aforo para cada servicio”, expresó.
La población católica esperaba con ansias las actividades en conmemoración a la Virgen de la Asunción que se celebra cada 15 de agosto.
Debido al riesgo de la pandemia, la Parroquia Nuestra Señora de la Asunción no sacará la procesión por segundo año consecutivo pero, mantiene las actividades en línea mientras el templo permanecerá abierto para quienes deseen visitar la imagen.