“Loach expresa su profundo interés por las personas, su destino y el compromiso de crítica social con diferentes técnicas cinematográficas”, añadió al desvelar el premio.
Ken Loach, de 70 años, atrajo al público en 1966 con Cathy Come Home, un drama semidocumental de la BBC sobre una familia sin techo de Reino Unido que alcanzó una audiencia de 12 millones de personas y colapsó las líneas telefónicas de la cadena con llamadas de personas ofreciendo ayuda.
La vivienda social, recuerda el festival, se incluyó al año siguiente en las agendas de los políticos del país y hasta la fecha Cathy Come Home sigue siendo una de las películas más influyentes de la historia de la televisión.
Tras el rotundo éxito de su primer largometraje, le siguieron otros como Kes (1969), The Gamekeeper (1979), The Wind that Skakes the Barley (2006) -con el que consiguió la Palma Oro de Cannes- o el más reciente, The Sprit of 45 (2013).
Sus películas, que a veces cuentan con actores no profesionales, se mantienen en la línea entre el documental y la ficción.
Loach ha demostrado constantemente su pasión por contar historias sobre el día a día de la gente de a pie y por atreverse a tratar asuntos sociales controvertidos, subrayó la Berlinale.
“Homenajeamos a Ken Loach como director y como un hombre que refleja las injusticias sociales, a menudo con humor, en sus películas”, apuntó Kosslick.
Como parte del homenaje, la edición número 64 de la Berlinale, que se celebrará en febrero del año que viene, exhibirá una selección de diez de sus películas.