Comenta que la firma ha identificado seis megatendencias, las cuales resume en futuro digital, crecimiento del emprendimiento, mercado global, mundo urbano o concentración de personas en el área urbana, recursos del planeta y reinvención de la salud de la mano de la tecnología.
Datos de las tendencias mundiales fueron recogidos y analizados por Ernst Young (EY), firma que presta servicios de auditoría e impuestos.
El 80% de las compañías comenta que sus clientes están cambiando su manera de acceder a productos y servicios.
51% De esas compañías está cambiando sus modelos de precios y de entrega.
El gasto a través de dispositivos móviles crecerá de US$204 mil millones (2014) a US$626 mil millones en el 2018.
10% Del PIB significan las remesas familiares al país, pero puede bajar con los años.
La segunda y tercera generación de migrantes olvidan de la raíz, y la posible baja en remesas impactaría la economía.
Salazar menciona que las empresas y prestadores de servicios no deben cometer el error de pensar que ese tipo de grandes tendencias solo se dan e impactan en países desarrollados.
Su impacto es en cualquier país del mundo, ya sea porque vaya a ser un líder en alguno de estos temas o porque hay sectores que dependen del comportamiento, economía o decisiones de otros países, expone.
Por ello, “los países en vías de desarrollo tenemos que buscar de qué manera encontramos oportunidades para no quedarnos más rezagados”, añade.
Según el ranquin que menciona, el punto que más impacto pueda atener es el del futuro digital, ya que los avances en la tecnología están relacionados con otras megatendencias en educación, salud, infraestructura y otros, y la tecnología cada vez se involucra más en el quehacer de las empresas y el ser humano.
El estudio muestra que poco a poco las competencias necesarias para poder lograr éxito en el futuro dependen en mucho del conocimiento de todo el tema digital, explica el consultor.
Ahora, indica, uno se cuestiona si las carreras que hay en Guatemala serán las que tienen futuro dentro de 15 años.
El tema académico va más enlazado con el sector de educación; sin embargo, se genera por el tipo de aptitudes y conocimientos que ahora demandan las empresas para ocupar los puestos o prestar el servicio, señala Salazar.
“En otros países ya están comenzando a lanzar en forma masiva carreras en diferentes ingenierías, en robótica, pero en Guatemala aún es es incipiente” comenta.
Se debe tomar en cuenta que, según el estudio, para el 2030 el 47% de los empleos va a poder ser sustituido por las máquinas.
La forma de trabajo y de contratación está cambiando. Hay labores presenciales que necesitan movilización, pero el resto se puede hacer con las facilidades de la tecnología.
Y precisamente la tecnología tiene relación con la forma en que se están desarrollando los temas de servicios para la salud, aspecto que se toma como la otra megatendencia a la que denominan reinvención de la salud.
El estudio de EY refiere que el cuidado de la salud estará aún más conectado con la vida cotidiana a través del desarrollo de soluciones de salud móviles y sociales.
Hasta ahora, explica, existen más de 20 mil aplicaciones para teléfonos inteligentes para el cuidado de la salud. Además, entre el 2013 y el 2018, el mercado global de sensores móviles de salud y bienestar crecerá en 40% anual, añade.
Los avances de la ciencia permitirán, además, transformar el desarrollo de los medicamentos. “La medicina personalizada alcanzará madurez” y “las compañías del cuidado de la salud competirán cada vez más con nuevos participantes de campo no tradicionales”, refiere el estudio.
La otra megatendencia es el crecimiento del emprendedurismo. Casi el 50% de los emprendedores del mundo tiene entre 25 y 44 años, indica Salazar. Añade que los jóvenes están prefiriendo comenzar un negocio en lugar de estar empleado en una empresa.
Según datos de Pronacom, Guatemala ocupa el puesto 9 en el indicador del Monitor Global de Emprendimiento 2013-2014, por su alta tasa de emprendedurismo.
A ese respecto, Kristhal Galdámez, consultora ejecutiva de Manpower Guatemala, menciona que ahora los jóvenes están dispuestos a enfrentar más riesgos y retos con menos temores.
Recomienda a las empresas conocer estas tendencias y ofrecer posiciones con flexibilidad. Añade que los nuevos profesionales ya no solo toman en cuenta el factor salario para tomar un empleo; ahora evalúan aspectos como la reputación de la empresa, flexibilidad, equilibrio familiar, nivel de reto y otros.
Aunque Guatemala ocupa el puesto número 7 en el indicador de obtención de crédito del Doing Business 2016 en Latinoamérica y el Caribe, y el puesto 28 de 140 economías en el indicador de servicios financieros del WEF 2015-2016, Salazar agrega que el mayor problema que enfrentan los emprendedores en el mundo, incluyendo nuestro país, es la falta de financiamiento.
Guatemala está atrasada en ese tipo de financiamiento. En México hay una institución del Estado que evalúa si el proyecto es viable y le provee apoyo para llevarlo a cabo, ejemplifica Salazar.
En otros países también hay casos en los que las empresas privadas dan el financiamiento para proyectos de emprendedores y que así se desarrollen productos, aplicaciones o campañas que puedan explotar, aspecto que podrían tomar de ejemplo otras empresas en nuestro país, comenta. Aquí se está dando este caso en el área de tecnología, como el Campus Tec, que es una incubadora de proyectos.
Legislación
Para adaptarse a las megatendencias, Guatemala también necesita modernizar su legislación, que está rezagada, dice Salazar. Entre estos, el Código de Comercio, que data de 1970, en temas como comercio digital.
También se deben actualizar el Código Laboral y las leyes fiscales.
En el tema laboral, debe permitirse más flexibilidad para trabajo, desde el hogar o no presencial, y que los trabajadores logren tener prestaciones y no que en este tipo de modalidades solo se facture, por lo que el trabajador “no tiene ninguna ventaja laboral, porque conceptualmente no hay relación de dependencia”.
En leyes fiscales, la aplicación el impuesto sobre la renta debería modernizarse, agregó.
“Existe una premisa en el mundo de los negocios, toda dinámica siempre es constante y evolutiva, siendo el talento humano el centro de todo”, menciona Galdámez.
Conozca las seis megatendencias
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Futuro digital
Oportunidades: se pueden aprovechar dispositivos habilitados por internet para capturar gran cantidad de información, acceder a nuevos mercados, transformar productos existentes, introducir nuevos modelos de negocio y entrega.
Desafíos: nueva competencia, cambio de la participación del cliente y modelos de negocio, transparencia, preocupaciones sobre la privacidad y amenazas de ciberseguridad.
Cambia la forma en que se trabaja, hay más máquinas, el software se diseña para reemplazar a los humanos.
El 47% de ocupaciones en economías avanzadas enfrentan un alto riesgo de ser automatizadas.
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Emprendedurismo
Crece el espíritu empresarial basado en aprovechar las nuevas oportunidades. Emprendedores de alto impacto: seguirán construyendo negocios transformadores, ya no se limitan a los mercados maduros, sirven como modelos para nuevos emprendedores.
La cara del movimiento emprendedor está cambiando en todo el mundo. Casi el 50% de los emprendedores del mundo tiene entre 25 y 44 años de edad.
La manera más eficaz de acelerar un emprendimiento es facilitar el acceso al financiamiento, pero la falta de este beneficio es el obstáculo más grande a la sobrevivencia de los emprendedores.
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Mercado global
Las tasas de crecimiento más altas y la demografía favorable en los principales mercados de rápido crecimiento seguirán siendo una característica de la próxima década.
En el 2014, los mercados de rápido crecimiento representan el 38% del PIB global, (US$223 billones), y para el 2030 se prevé que llegue a 63%.
Los patrones de flujos comerciales sufrirán una transformación continua. Aumentará el comercio de servicios. Del 2012 al 2035 será cinco veces mayor y llegará a US$8.7 billones.
Los países en vías de desarrollo seguirán aumentando su relevancia en el mercado.
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Mundo urbano
Las ciudades siguen en crecimiento, aspecto que impulsará cambios importantes en los sectores de infraestructura.
La concentración en áreas urbanas exigirá que los creadores de políticas y sector privado hagan una planificación eficaz de las infraestructuras.
Para el 2030, las 750 ciudades más grandes del mundo tendrán otros 220 millones de consumidores de clase media.
Las ciudades sustentables deberán atender la pobreza y población marginada, porque se estima que cerca de mil millones de personas viven en zonas marginadas y si no hay avances, la cifra se duplicará en 15 años.
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Recursos del planeta
El aumento en la demanda y las nuevas fuentes de suministro impulsan la innovación en el sector energético y de recursos naturales. Aumentará en 33% la demanda de energía.
Se intensificará la lucha por recursos limitados y cambiará la dinámica de la mezcla de energía global.
El cambio climático requerirá medidas para adaptarse o desarrollar resistencia, y la transparencia y seguridad de las cadenas del suministro globales se volverán críticas.
Impacto: escasez de agua afectará seguridad alimentaria y energética. En el 2030, la demanda será 40% mayor que la oferta y la escasez afectará al 50% de la población. mundial.
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Salud reimaginada
La tecnología y los datos demográficos están convergiendo para generar cambios sin precedente; además, los retos en el costo, la calidad y el acceso a servicios de salud seguirán impulsando iniciativas de reforma.
La incidencia de enfermedades crónicas aumentará considerablemente, algunas soluciones requerirán cambio de hábitos.
La información genética y genómica está transformando el desarrollo de los medicamentos.
La medicina personalizada alcanzará madurez. Las compañías del cuidado de la salud competirán cada vez más con nuevos participantes de campo no tradicionales.