El Banguat también asegura que de octubre a diciembre se ha observado una “tendencia a la apreciación, debido a que ya fue satisfecha la demanda de divisas para importaciones y aumentan los ingresos por exportaciones” y por esta razón esperan que el tipo de cambio regrese a los niveles anteriores.
Un comunicado del Banguat señala que “el tipo de cambio nominal en Guatemala es libre, es decir, se determina por la oferta y la demanda de divisas en el mercado, caracterizándose por una baja volatilidad que refleja la confianza del público en la moneda nacional. En efecto, la volatilidad del tipo de cambio en Guatemala es la más baja de América Latina, reflejando la fortaleza macroeconómica del país”.
Agrega que “el tipo de cambio de referencia pasó de Q7.74080 por US$1.00 el 1 de septiembre de 2022 a Q7.91233 por US$1.00 el 5 de octubre de 2022, disminuyendo luego a Q7.87570 por US$1.00 el 12 de octubre de 2022, lo que significa una depreciación de únicamente 1.7% en dicho período”.
El documento añade que “el comportamiento del tipo de cambio se asocia, en buena medida, a factores de carácter estacional. En efecto, la estacionalidad indica que en septiembre de cada año el tipo de cambio nominal alcanza su nivel más alto, debido a un incremento en la demanda de divisas para importaciones asociadas a las fiestas de fin de año, y un menor ingreso de divisas por exportaciones”.
“En los meses de octubre a diciembre empieza a observarse una tendencia a la apreciación, debido a que ya fue satisfecha la demanda de divisas para importaciones y aumentan los ingresos por exportaciones, además, los ingresos de divisas por remesas familiares tienden a aumentar en la última parte del año, por lo que se espera que el tipo de cambio regrese a los niveles anteriores”, refiere el documento.
Agrega que el Banguat, “utilizando los mecanismos de participación previstos en la política cambiaria, vendió divisas en el mercado desde inicios de septiembre hasta el 4 de octubre de 2022, en tanto que entre el 5 y 6 de octubre ya no tuvo que vender, dado que la demanda de divisas empezó a ceder, como se anticipó; incluso, ya el 7 de octubre, los participantes del mercado tuvieron excedentes de divisas, por lo que el Banco de Guatemala participó comprando en el mercado cambiario”.
“A partir de esta última fecha, ya no se observan presiones a la depreciación en el mercado, en línea con la estacionalidad del tipo de cambio. Tomando en cuenta lo anterior, el Banco de Guatemala reitera su compromiso con procurar la estabilidad del tipo de cambio nominal, para lo cual utilizará todos los mecanismos previstos en la política cambiaria vigente”, concluye el documento.