Las nuevas inversiones de las compañías operadoras se concentrarán en la aplicación de productos relacionados al uso de las tecnologías y el uso del teléfono ya no exclusivamente para la transmisión de voz, si no para otros usos.
En 2018 la telefonía móvil registró un crecimiento de 2.4% y dejó atrás aquellos tiempos en que el ritmo era exponencial de hasta dos dígitos.
El año pasado se abonaron 481 mil 38 nuevas líneas de telefonía móvil, según el boletín estadístico de la Gerencia de Regulación de Telefonía de la Superintendencia de Telecomunicaciones (SIT), entidad adscrita al Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (CIV).
Con estas cifras, las autoridades y analistas interpretan que el sector de las telecomunicaciones en el país ya alcanzó su punto de madurez y empezará la migración a otros usos desde el teléfono móvil que se reflejen en los siguientes cinco años.
Ahora Guatemala ingresa al ciclo del desarrollo, con la aplicación de nuevas tecnologías a un mayor consumo de internet desde el dispositivo, con una velocidad más alta —cuarta tecnología.
De momento se mantiene en pie que este año la SIT pueda asignar la frecuencia 4G —cuarta generación—, la banda 700 MHz y la 600MHz, para el uso de las telecomunicaciones que aumentaría la banda ancha —para transmisión de datos—, así como el planteamiento de reformas a la Ley General de Telecomunicaciones, para estimular el uso y acceso del internet y ampliar la cobertura y datos móviles, expuso Cristian Aguilar, viceministro de Comunicaciones, encargado del área de Telecomunicaciones y Transporte.
Mercado sólido
El boletín de la SIT señala que hasta el 31 de diciembre del 2018 había en el país 20 millones 467 mil 520 usuarios móviles entre pospago y prepago.
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Eso significó un incremento de 2.4% en relación con el 2017, cuando el número de usuarios era de 19 millones 986 mil 482. No obstante, el crecimiento de la telefonía móvil desde 1997 al 2018 es de 4 mil 663%.
Los registros señalan que en 21 años el número de abonados se incrementó, al pasar de 429 mil 712 en 1997 a los 20.4 millones al cierre del ejercicio pasado.
“El mercado guatemalteco alcanzó una madurez y las firmas operadoras tienen que proveer nuevos servicios que estén acordes a las necesidades de los consumidores”, afirmó.
El funcionario comentó que, aunque se mantiene una rentabilidad en el negocio, las empresas deben diversificar sus servicios para poder ofrecer otros productos que los consumidores adquieran.
Aguilar citó como ejemplo que, a escala mundial, el internet está prestando servicios en muchas actividades, con dispositivos que se conectan a la red para el funcionamiento de los aparatos eléctricos, televisores o refrigeradores, y son nuevos nichos de negocios que están surgiendo.
Competitividad
Para hacer un mercado más competitivo, las inversiones de las empresas se estarán enfocando en este tipo de actividades, es decir, para mejorar la tecnología.
Afirmó que en el futuro habrá crecimiento del mercado de las telecomunicaciones, pero no a las tasas de años anteriores.
“El crecimiento fue porque no se estaba cubriendo en telefonía móvil a una buena parte de la población que fue constante y ahora el indicador se moverá con el crecimiento de la población”, precisó el viceministro.
Ricardo Flores, consultor en telefonía, dijo que este “freno” no solo se presentó en Guatemala, sino a escala mundial.
“Las empresas no fueron tan agresivas en presentar nuevas ofertas en el cambio de los dispositivos estándares a inteligentes y las ofertas que se presentan no son tan relevantes y trascendentales”, afirmó.
Los diseños, como los programas de software que se han presentado, no tienen grandes cambios en los dispositivos para crear una nueva necesidad y adquirir los celulares. “Los teléfonos de baja gama y de bajo costo cumplen con los estándares y las prioridades de los usuarios que cumplen con sus funciones y no hay necesidad del usuario de adquirir un nuevo modelo”, puntualizó.
El 93.4% de los usuarios móviles siguen en la modalidad de pospago, comúnmente llamados tarjeteros, mientras que el 6.56% se encuentran en el sistema de crédito o línea. Eso significa que, de cada 10 líneas, nueve se activan como pospago. El número de usuarios móviles prepago es de 19.1 millones y de crédito, 1.3 millones.
La compañía Tigo reportó 10 millones 962 mil usuarios, con una participación del mercado del 53%; le sigue Claro, con cinco millones 597 mil y una participación de 27.3%, y Telefónica de Guatemala, con tres millones 907 mil abonados y 19% de mercado.
En el sistema tarjero, Tigo registró 10.3 millones de usuarios y 649 mil a crédito; Claro, cinco millones de usuarios prepago y 504 mil por crédito; Telefónica, 3.7 millones prepago y 189 pospago.
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Las cifras aún no integran la adquisición, este año, de Telefónica en Guatemala por parte de Claro.
Tráfico de llamadas
El total de tráfico generado por la telefonía móvil en 2018 fue de 14 mil 198 millones de minutos hacia todas las redes.
La cifra es la más alta dentro de su propia red, según el reporte, mientras en la telefonía fija fue de mil 458 millones de minutos.
En 10 años las empresas de telecomunicaciones han atraído flujos de inversión extranjera directa por US$1 mil 259 millones, el monto acumulado del 2007 al 2018.
En relación con la telefonía fija, se alcanzaron dos millones 436 mil líneas el año pasado.
Al sumar la telefonía fija con la móvil, el sistema de telecomunicaciones en operación se sitúa en 22 millones 903 mil 613 usuarios, reportó el ente rector de telecomunicaciones.
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