El fabricante japonés estableció una empresa de riesgo compartido con Intelligent Energy Holdings -compañía británica que fabricó el primer prototipo de motocicleta de hidrógeno a mediados de la pasada década- a través de la cual desarrolla la scooter de hidrógeno (basada en el actual modelo de 120cc de Suzuki) que promete ser la primer moto de este tipo comercializada en el mundo.
Empleando el modelo compacto de célula de combustible (llamada célula Burgman) Suzuki espera también desarrollar vehículos ligeros de hidrógeno de cuatro ruedas.
En diciembre de 2014 el también japonés Toyota Motor se convirtió en el primer fabricante de vehículos en comercializar un coche que funciona con hidrógeno -el Mirai- y que emite vapor de agua en vez de gases de efecto invernadero.
Suzuki espera seguir sus pasos en el sector de las motocicletas y convertir el scooter Burgman en uno de sus productos de referencia una vez que las autoridades japonesas aprueben un marco regulatorio que certifique la seguridad de los tanques de combustible.